La última película que filmó Paul Walker antes de morir. Si el productor y guionista es Luc Besson (“Nikita”, “El quinto elemento”, “El transportador”) la película ya cuenta con varios puntos a su favor. Ambientado en Detroit en el año 2018, el film tiene mucho ritmo y resulta bien estrepitoso, no te da respiro ni un solo minuto, escenas a toda acción, explosiones, persecuciones, autos que vuelan, vuelcan con varias piruetas, tiros, peleas, maniobras, intriga, traiciones, luchas entre mujeres, cien por ciento adrenalina asegurada, muchas peleas coreografiadas y el uso de la cámara lenta. Las antiguas mansiones de ladrillo son ahora escondites de los delincuentes más peligrosos de la ciudad y para proteger el resto de la ciudad, la policía construye alrededor de esas mansiones, un muro como división. Pero allí los delincuentes cuentan con importante armas y trafican drogas, el jefe es Tremaine Alexander (RZA, cantante de hip hop; "Django sin cadenas"), sus ayudantes: Yeti (Robert Maillet, un ex luchador libre de 2,13 metros de altura), y Rayzah (Ayisha Issa, ex integrante del equipo nacional brasileño de ju-jitsu), entre otros. Contiene una pequeña similitud al film “La zona” de Rodrigo Plá donde una sociedad ante la delincuencia decide dividirse, de un lado quedan unos y del otro lado los forajidos, lo cual nos muestra una sociedad rota. Al frente de la lucha contra los delincuentes se encuentra un policía encubierto Damian Coller (Paul Walker) quien vive combatiendo la corrupción, y circunstancialmente se ve obligado a trabajar con Lino quien utiliza el "Parkour," que es el arte del desplazamiento (David Belle, “Familia Peligrosa”), un ex-convicto que quiere una nueva vida e ir por el camino del bien, ambos se complementan y tienen que unirse cada uno por motivos diferentes, Damian quiere terminar con la delincuencia y Lino rescatar a su ex novia Lola (Catalina Denis) que se encuentra en peligro y esposada a una bomba muy poderosa que destruirá todo. La historia tiene una vuelta de tuerca y Brick Mansions que significa "Mansiones de Ladrillo", es una adaptación de la película francesa "Banlieue 13" (2004) de Pierre Morel. Cuando finaliza el film se lo dedican a Walker quien como muchos saben falleció 30 de noviembre de 2013 a las 40 años, esta es la segunda película que se ve en nuestro país, ya que en febrero de este año vimos “Horas desesperadas” (2013).
Los tres protagonistas tienen buena química, le dan a la trama suspenso, misterio y un giro al policial. Todo gira en torno a dos estafadores de poca monta, la película se encuentra ambientada en 1969. Juan (Carlos Belloso), conoce a Mario (Tomás Pozzi, actor argentino que se luce trabajando en España, “Torrente 4”, "Manolete") y piensa en un show engañando a los espectadores, haciendo pasar a su compañero que es pequeño de estatura como un muñeco (este acepta porque necesita el dinero para algo muy especial), siendo un falso ventrílocuo y en los momentos comprometidos lo mete en una valija. Juntos con un colectivo totalmente equipado y adaptado también como un teatro ambulante, recorren los pueblos de Buenos Aires con la idea de algún día realizar algún show en la Avenida Corrientes. Durante su recorrido por los distintos lugares donde brindan sus exhibiciones conocen a Lucía (Emilia Attias), con una vida dura a los 14 años, llega a Chacabuco, al poco tiempo su madre fallece, no conoce a su padre, queda totalmente desamparada, es una hermosa cantante y bailarina de flamenco. Este personaje pone todo su encanto y sensualidad, interpreta con gran ductilidad las canciones escritas por el director, Becky Garello, con música del talentoso Iván Wyszogrod. Con el correr del tiempo el espectador conocerá su misterioso pasado, como así también el de cada uno de los intérpretes. Los protagonistas realizan una muy buena composición de personajes con gran maestría, Carlos Belloso (sobresaliente, soberbio e inteligente), Tomás Pozzi (perspicaz y sagas), y Emilia Attías se destaca es su primer protagónico en cine y tiene un papel para lucirse, los tres logran tener mucha química en ese triángulo amoroso. El resto del elenco secundario muestra que algunos logran sus interpretaciones más que otros: Adrián Navarro, Roberto Carnaghi, Arturo Bonín, Naim Sibara, Manuel Vicente, entre otros. La historia muestra a estos seres con sus necesidades económicas y sus propósitos, cuando las personas tiene que vivir a la sombra de otra, el amor prohibido, los sueños, el deseo, los secretos, mentiras, los ocultamientos, los momentos más oscuros que puede tener un ser humano, con toques bohemios y la melancolía del teatro ambulante. Buena fotografía y banda sonora, y con una vuelta de tuerca, pero uno de los problemas que tiene el film es que el conflicto no logra tener la fuerza, el argumento no es sólido, le falta mayor tensión, y la voz en off no aporta demasiado.
Un film cargado de adrenalina, vibrante, conmovedor y entretenido. Sin duda posee altos contenidos de humor, acción y una buena propuesta para los seguidores del comic. Nos reencontramos con el relanzamiento de este superhéroe que viene de la mano de Marc Webb (“El Sorprendente Hombre Araña”) y que representa a un personaje que a lo largo de muchos años ha logrado tener varios seguidores y fanáticos. El guión comienza con una breve introducción que describe a Richard Parker (Campbell Scott) y Mary Parker (Embeth Davidtz) los padres de Peter Parker, dando algunas pistas que con el tiempo descifrará el adolescente Peter (Andrew Garfield). Se desarrolla a toda acción esta secuencia aérea que tiene alguna similitud con la apertura de “Batman El Caballero de la Noche Asciende”. Es visualmente extraordinaria en varias escenas, pero esto no termina ahí, pasa el tiempo y vemos a “El hombre araña” balanceándose por los rascacielos de Nueva York cuidando la ciudad y combatiendo la inseguridad. Esta tan pendiente con el servicio a la comunidad que en plena acción lo llama su novia Gwen Stacy (Emma Stone) que ha olvidado algo. La situación cuando suena el celular es muy cómica sobre todo algo que sucede y que está relacionado al ringtone que suena, pero a pesar de todo llega a tiempo para su graduación, abrazar y besar a su novia, todo rodeado de una bella fotografía, impresionante destreza y momentos llenos de humor, amor y ternura. Pero a lo largo de la historia existen varios pedidos, como los del padre a los hijos por un lado, el compromiso que tiene Peter con su padre; por el otro el de Harry Osborn (Dane DeHaan) con Norman Osborn (Chris Cooper); Peter le prometió al Captain Stacy (Denis Leary), que no pondrá en riesgo a su hija Gwen y se alejará de ella, y no deja de tener distintos tipos de enredos sentimentales porque ambos se aman y varias situaciones lo humanizan al superhéroe. Luego surgen: las promesas, las amenazas, el amor, la amistad, el heroísmo, las obligaciones y los encargos. La trama nos ofrece tres villanos muy poderosos: un mafioso ruso de nombre Aleksei Sytsevich “Rhino” (Paul Giamatti), Electro / Max Dillon (Jamie Foxx) y Green Goblin / Harry Osborn (Dane DeHaan) que nos ofrecen escenas de mucha acción, estupendos efectos especiales, peleas muy duras, persecuciones, una animación que resulta espectacular, hay subtrama, misterio y secretos. Funciona muy bien la química entre Peter Parker y Gwen Stacy y ese amor con toques adolescentes. Es un poco reiterativa pero resulta entretenida, además otro de los personajes que aparece es el de Felicia Hardy " la Gata Negra" (Felicity Jones) y esto se constituye en otra de las pautas que nos confirman que ya se encontrarían en proyecto la tercera y cuarta entrega.
Una historia de amor y venganza en el litoral de la Argentina en la década de los 50. La trama está basada en la tercera novela del cantante folclórico y escritor argentino, Horacio Guarany, “Sapucay” editada en el año 1993. Llega al cine con algunos años de retraso desde su rodaje, con la dirección Fernando Musa. Tiene un clima gauchesco y con toques del western, con algunas similitudes a “Aballay, el hombre sin miedo” (2010) el western gauchesco de Fernando Spiner. Ambientada en 1950 se desarrolla en algún pueblo del litoral de la Argentina, todo gira en torno a la muerte a traición de Calixto (Emilio Bardi) y como dice la tradición, su hijo mayor Cali (Abel Ayala, "Maradona, la mano de Dios"; “El niño de barro”) para que su alma pueda descansar en paz debe vengarlo. Su padre fue asesinado por la espalda en una carrera de caballos, él deja a su familia y atormentado por esta situación emprende un largo viaje con ese único objetivo. En medio de un territorio hostil, inhóspito y en parte desconocido porque este joven recién sale a recorrer la vida y con esa sed enceguecida de venganza no tarda en meterse en líos de los cuales sale herido, pero quien lo encuentra siente algo especial por Cali (más adelante sabremos porque) lo cura y le da trabajo, el es Don Chusco (Horacio Guarany), capataz de una estancia y además lo trata como a un hijo. Pero en medio de tanto dolor, fantasmas, angustia y el encierro en el alcohol para ahogar sus penas conoce a Lucía (Florencia Otero) que toca el piano como un ángel y es la niña de la estancia, no tardan en sentir algo y como en una riña de gallos se deberá enfrentar a otro compañero de trabajo para disputarse el amor Lucía, el “Tape Ledesma” (Roberto Vallejos). El relato tiene esa impronta gauchesca bien nuestra, con toques de nostalgia y tragedia, el título está relacionado con la historia, se intentan ir creando climas, en esa cabalgatas, peleas a cuchillo, las pulperías, carros, arreo, entre otras actividades que son parte de la historia .El cielo y las tormentas forman parte del paisaje y son resaltadas por la estupenda fotografía de Jorge Crespo (“Samurai”). Forman parte además: la voz en off de Guarany quien también es uno de los personajes con una buena interpretación, las actuaciones de Ayala, Vallejos y Otero están bien pero le faltaron algunos matices y el guión resulta un poco previsible. Actores secundarios: Enrique Liporace (Patrón, Don Clemente), Luisa Calcumil (la abuela) Alberto Benegas (Nicasio) y María Laura Cali (Madre). Además actúan Ulises Dumont (1937-2008) y Carmen Vallejos (1922-2013) es la última película que filmaron (para recordarlos).
Muestra las dificultades que pasan una madre oso y su cría, sin golpes bajos. Este documental se centra en la vida de una madre oso de color marrón llamada Sky y sus dos cachorros jóvenes: Scouts (un macho) y Amber (una hembra), estos nacen en una cueva refugio que su madre buscó para la hibernación, pero cuando llega la primavera se dirigen a la Península de Alaska ante un paisaje cubierto de nieve y van en busca de alimento, porque mamá osa tiene que comer 90 kilos de comida por día para poder alimentar con su leche a los cachorros. A lo largo del viaje da felicidad ver a esos dos pequeños ositos disfrutando de sus juegos, se lamen, su andar, su amor, dan en todo momento ternura y van a pura diversión, pero también existe el peligro, (una filmación excelente) ante una avalancha de nieve que puede resultar mortal, en otro de los momentos ante la crecida del río uno de los cachorritos se encuentra exhausto y queda dormido y su vida se encuentra en peligro, pero finalmente todo termina bien. En esta larga travesía Ámber viaja casi en todo momento en el lomo de su madre mientras Scouts sigue detrás, a veces se distrae bastante, en el transcurso de este gran recorrido se encuentran con otros osos Magnus, el oso macho alfa dominante, y Chinook, un oso marginado, ambos muy hambrientos y capaces de devorar a los cachorros, al igual que el lobo Tikaani, que se mantiene siempre al acecho esperando la oportunidad para comerlos o las sobras que dejan. En todo momento muestra a esta mamá osa como cuida, alimenta y les muestra como subsistir. Son una familia que atraviesan todo tipo de desafíos y que le deja siempre una enseñanza al espectador, demostrando un estilo muy didáctico. Llena de imágenes estupendas y con un gran montaje, muy buena iluminación, manejo de cámara, mostrando un paisaje increíblemente bello, el cielo en todos sus estados, un gran trabajo de edición mostrando los salmones y sus saltos que son como vuelos en un río rápido y como van a las bocas de los animales hambrientos, momentos de fiesta y de peligros, una alimentación que consiste en: hierba, almejas y salmón todo sirve para desarrollar sus reservas de grasa. Hay que ver los créditos finales dado que muestran cómo la tripulación fue capaz de capturar cada una de las distintas situaciones. Entre estos animales hay peleas, como así también no falta el toque de humor, la música de George Fenton ofrece suspenso y la alegría de las especies. La narración en off corresponde al actor John C. Reilly.
El portugués Diogo Morgado considerado el Jesús más sexy de la historia, ahora en la pantalla grande. Es la adaptación cinematográfica de la miniserie de “The History cannel”: “La Biblia” (2013), la película que narra la vida de Jesús de Nazaret, desde su nacimiento hasta su crucifixión y posterior resurrección. El director Spencer es un buen investigador que ha realizado varios documentales y series para la televisión, y este es todo un desafío: llevar a la pantalla grande este film y abordar un tema y la vida de un personaje histórico que ya fue representado por muchos como: Jeffrey Hunter en “Rey de Reyes” (1961); "Jesús de Nazaret" (1977) de Franco Zeffirelli cuyo protagonista fue Robert Powell en el papel de Jesús; "La pasión de Cristo" (2004) de Mel Gibson protagonizada por Jim Caviezel, cada uno de ellos le han puesto su impronta y en esta nueva versión quien se pone en la piel de Jesús es el ex modelo portugués y galán de telenovelas Diogo Morgado. La película en Estados Unidos y en el mundo viene recaudando varios millones de dólares logrando una buena respuesta del público, veremos que pasa en nuestro país, ya que justo se estrena en jueves santo. Esta entrega que viene de la mano del director Christopher Spencer puede servir para reflexionar y podría ser ideal para aquellos que no conozcan la historia y no hayan visto las películas citadas anteriormente. Todo comienza (haciendo rápidamente referencias con la voz en off del Apóstol Juan) con Adán y Eva, Noé, Moisés y Abraham y luego el relato de Pedro (Darwin Shaw). La narración se centra en el nuevo testamento, allí se encuentra todo lo que dice la biblia y el que la conozca no se va a encontrar con nada nuevo en este film, tiene momentos épicos y dramáticos, vale aclarar que resulta bastante distinta a "La pasión de Cristo", ya que esta se detenía en las últimas doce horas de Cristo, resultando bastante realista, sangrienta, cruel y hablada en arameo. En cambio esta versión es similar a la de Franco Zeffirelli, más clásica, estética y que se adecua a las parábolas bíblicas, con algunas tomas en CGI, cuenta con un buen vestuario, varios extras y la banda sonora de Hans Zimmer (“Gladiador”; “El origen”), posee falta de ritmo y por momentos tiende aburrir. En cuanto a las actuaciones, son muy pocas las que se destacan, personajes naif y algunas actrices tienen mucha cirugía estética. Acompañan en el elenco: María (la irlandesa Roma Downey, también productora), María Magdalena (la inglesa Amber Rose Revah), Poncio Pilatos encarnado por el inglés Greg Hicks, San Simón Pedro (el inglés Darwin Shaw), Claudia (la inglesa Louise Delamere), Caifás (actor inglés Adrian Schiller), entre otros.
Tres amigos inseparables un pacto que pueden traer consecuencias. Esta es una comedia romántica liviana que tiene como principal protagonista al carilindo Zac Efron, su presencia en los afiches del cine y en la pantalla resulta atractivo para sus seguidoras. La trama es muy sencilla se desarrolla en Nueva York ellos son tres amigos inseparables: Jason (Zac Efron) Daniel (Miles Teller “Proyecto X”) y Mikey (Michael B. Jordan, “Poder sin límites”). Ellos hacen un pacto; mantener su soltería, divertirse, tener sexo, ser libres y no comprometerse con nadie, esto sucede cuando su amigo Mikey queda destrozado al separarse de su esposa Vera (Jessica Lucas) y además se entera de su infidelidad, y como si fueran los tres mosqueteros y amigos inseparables su lema será “uno para todos, todos para uno”. Pero desde los primeros minutos que corre la cinta se sabe que ellos no van a cumplir con esto y es muy previsible, Jason (Zac Efron), no quiere comprometerse con nadie, tiene sexo ocasionalmente hasta que conoce a Ellie (Imogen Poots, “V de venganza”), mantiene una relación pero no tarda en sentirse enamorando; Mikey trabaja de enfermero intenta concentrarse en su trabajo pero no puede olvidar a su esposa Vera y sin que nadie lo sepa continua viéndola y Daniel pese a todas las libertades que se toma termina teniendo una relación amorosa con su mejor amiga Chelsea (Mackenzie Davis). Todo lo que se va viendo está muy trillado, relaciones ocasionales con enredos, mentiras, engaños, Efron, Teller y Jordan tienen buena química, Chicos con hormonas alteradas, gags de todo tipo, protagonistas desnudos, lindas chicas, algún juguete sexual, chistes escatológicos, un guión poco sólido, situaciones tontas, una comedia fallida y floja. Solo para aquellos seguidores de este tipo de comedias y para disfrutar de unos pochoclos.
Para toda la familia, esta segunda parte que supera a la primera. Vuelven a la pantalla grande los guacamayos azules que debutaron con la primera parte en 2011: Blu (Jesse Eisenberg) y Perla (Anne Hathaway). Ahora este simpático matrimonio tiene tres hijos muy traviesos. Una gran fiesta de fin de año, samba, lindas canciones, fuegos artificiales, baile, coreografías, mostrando la gran ciudad, las playas como Copacabana, el Pan de Azúcar, el Cristo Redentor y lugares emblemáticos; todo lleno de color, mucho ritmo, un carnaval constante, humor, varios gags y nunca decae. Blu se siente muy cómodo viviendo en la casa de los ornitólogos Linda (Leslie Mann) y Tulio (Rodrigo Santoro), pero Perla comienza a sentir que necesitan organizar algunos cambios, para sacar a sus tres hijos de algunos vicios, Carla (cantante/actriz/comediante Rachel Crow) la mayor, es adicta a la tecnología y quiere su espacio; la estudiosa Bia (Amandla Stenberg de “The Hunger Games”) quien vive con su pico en un libro y a la que le gusta parlotear hechos y cifras, justo como su padre y el más joven y revoltoso Tiago (Pierce Gagnon),quien considera que ya es hora que se relacionen con la naturaleza. Esa posibilidad se la da cuando salen en el noticiero los científicos Linda y Tulio, dicen que hay guacamayos azules en el Amazonas, y todos deciden trasladarse para reencontrarse con su especie y lo hacen junto a sus amigos (Rafael, Nico, Pedro y Luiz). Pero ellos no están solos, los siguen con sed de venganza La cacatúa vengativa Nigel (interpretada por Jemaine Clement, de”Flight of the Conchords”) despreciado en la primera parte, ayudado por un oso hormiguero Charlie es mudo pero baila tap, genial y una rana venenosa Gabi (Kristin Chenoweth), enamorada perdidamente de Nigel, además un humano malvado acompañado por su mono que junto a otros quiere destruir el Amazonas talando árboles. Una vez allí Perla se reencuentra con su familia, la cual creía perdida, su padre Eduardo (Andy Garcia), muy rígido y a quien no le gusta la amistad con los humanos, Tía Mimi (Rita Moreno), Roberto (el cantautor-productor musical Bruno Mars), un viejo amigo de la infancia de Perla, entre otros y a medida que corre la cinta surgen distintos conflictos. El film contiene un claro mensaje ecologista, sobre el cuidado del medioambiente y la familia. Es visualmente esplendoroso viendo: los árboles, las plantas, cataratas y animales del Amazonas, mucho más colorida que la anterior, mucha samba y bossa nova, un gran despliegue, el buen uso del 3D aporta nitidez de imágenes, claridad, varios efectos para el espectador, entre otros. Todos sabemos que se acerca el Mundial por lo tanto no puede quedar afuera, aquí se ve una batalla entre los guacamayos azules y loros rojos el líder Felipe (John Leguizamo), a través de un partidito de fútbol. La banda sonora es una combinación de sonidos brasileños y música pop contemporánea; el soundtrack presentaba un reparto musical estelar, bajo la guía del compositor John Powell y Sergio Mendes, temas como: "What Is Love"; "Rio Rio"; Beautiful Creatures"; "Ô Vida"; "Batucada Familia"; entre otros. Todo indica que se viene “Río 3” por lo tanto la aguardamos con ansiedad.
Un hombre que desafío a todos para lograr su único objetivo. Esta es la ópera prima de Gastón Gallo quien ilustra la primera parte con imágenes en blanco y negro, mapas, entre otros datos y lo importante que era el tren (se me cayó un lagrimón recordando la importancia de este medio de transporte cuantos pueblos unía, producción, amores e ilusiones nos brindaba). Aquí todo comienza en 1956 cuando un niño” Tito Pereyra”en Tucumán con su bicicleta corre al tren con la idea de alcanzarlo solo desea irse a otro lugar en busca de una vida mejor y no acepta su vida actual, allí vive humildemente con su hermano Claudio (Roberto Vallejos, de adulto), una madre depresiva y su padre los abandono, estos hechos lo marcan a lo largo de su vida. Su madre finalmente lo lleva a Buenos Aires pero lo deja en un internado, este con el tiempo logra escapar junto a otro compañero, “el pirata” (Favio Posca, adulto, le pone mucho humor) y con el correr de los años lo vemos a este Tito Pereyra (Luciano Cáceres) que no le importa nada, trabaja por una propina, hace changas, lustrabotas y hasta se encuentra con su padre (Lito Cruz) un jugador empedernido, a quien desprecia y no olvida. Pereyra es un ser ambicioso Y excesivo, esto lo lleva a distintas situaciones de vida y el título del film tiene relación con el protagonista. Este es un film con una buena producción, un gran elenco (Luis Luque, Leticia Bredice, Lito Cruz, Juan Acosta, Pompeyo Audivert, Paloma Contreras, Fabio Posca, Roberto Vallejos, entre otros). Paloma Contreras como la novia de la adolescencia y Leticia Bredice como su esposa Elvira, ambas logran su personaje pero aparecen poco; la actuación de Luis Luque muy lograda y soberbia; Luciano Cáceres, se destaca, una interpretación excelente (tiene varios momentos pero me llegaron tres, frente a dos muertes y cerca del final, por razones obvias no puedo dar mayor detalle), y el resto del elenco tienen sus tiempos para enfatizar. Este film habla de una persona que venció todos los obstáculos, su objetivo era ser poderoso, conquistar al mundo, sin medir las consecuencias, se van combinando elementos de acción, drama y suspenso, muestra la población de distintas épocas y va matizando con los colores de esos períodos. Dentro de la ficción, se tocan temas relacionados con la política y la historia de un país, resulta bastante ambiciosa atravesando 30 años de historia, recorriendo diferentes sucesos históricos como la dictadura y los primeros años de la democracia y abarcando tanto tiempo no logra desarrollarse bien (desde 1956 hasta 1989), resulta algo irregular y se producen algunos baches.
Un thriller nacional interesante y conformado por un gran elenco .Un asesinato que oculta una verdad perturbadora. Todo gira en torno a la muerte misteriosa de un poderoso empresario de nombre Pedro Chazarreta (Mario Pasik) quien aparece degollado en su casa de La Maravillosa, un exclusivo country en las afueras de Buenos Aires. Chazarreta hace tres años atrás fue acusado de matar a su mujer. Quien se hace cargo de la investigación es “El Tribuno”, un prestigiosos diario y los destinados para cubrir la parte periodística son: el periodista Jaime Brena (el brillante Daniel Fanego) jefe de la sección policiales próximo al retiro y su reemplazo será el joven inexperto Mariano Saravia (Alberto Ammann, el cordobés, ganador del premio Goya como revelación por el film “Celda 211” en el 2010, aquí en una interpretación solida), muy rápidamente vemos la tirantez que existe entre ellos. Para este caso tan especial el director de “El Tribuno”, Lorenzo Rinaldi (José Coronado, actor madrileño), no tarda en ofrecerle una columna a la reconocida novelista de policiales Nurit Iscar apodada “Betibú” (Mercedes Morán de estupenda actuación, a pesar que mantiene algunos latiguillos televisivos), que quiso dedicarse a la novela romántica , fracasó y se encuentra fuera del mercado; y como no se encuentra trabajando se ve obligada a volver a colaborar con Rinaldi quien fue su amante (y como dice el refrán” donde fuego hubo cenizas quedan”, por lo menos de algún lado), y accede a instalarse en el country para resolver mejor el caso. De manera que queda conformado un trió perfecto para la investigación (los tres tienen buena química), Brena tiene mucho oficio y pertenece a la vieja escuela del periodismo (se hace en la calle y en el bar); el inexperto Mariano aportará lo suyo y junto a Nurit Iscar observadora y curiosa (además descubrirá el origen de su apodo “Betibú”), intentarán resolver el crimen. A medida que transcurre la historia cada vez se torna más interesante, llena de misterio e intriga. Resulta atrapante y atractiva, todos son sospechosos, contiene todos los elementos necesarios del thriller y policial con una trama bien oscura, se van creando distintos climas, como el del diario, entre otros toques, la participación de un personaje que no se encuentra en la novela homónima de Claudia Piñeiro que es Gato interpretado por Norman Briski, le otorga algún toque de humor y está hecho a su medida. Personajes secundarios: Roberto Gandolfini (Osmar Núñez), Luis Collazo (Gerardo Romano); Comisario Venturini (Lito Cruz); Hermano Chazarreta (Fabián Arenillas), entre otros. El guión de Ana y Miguel Cohan, posee algunas similitudes con el de “Las viudas de los jueves”, “Todos tenemos un plan”, “Tesis de un homicidio”, entre otras. Está bien contada, es muy buena la banda sonora de Federico Jusid y la fotografía. Toca temas bastante jugados: los engaños, los celos, la traición, la competencia laboral, la amistad, la corrupción, el poder policial y la política.