Muchos recordarán que esta historia fue publicada en 1974 por Stephen King (66) conocido por sus novelas de terror, muy reconocida en 1976 por su adaptación a la pantalla grande que realizó el director de cine y guionista estadounidense Brian De Palma (73). En aquella época el film resultó impactante por varios motivos (escenas de desnudez, el ciclo menstrual, la burla, una joven cubierta de sangre, entre otros), fue reconocida por la crítica y obtuvo una importante recaudación. Luego llegaron la segunda parte (1999), así como la película para televisión del 2002, (no obtuvieron los mismos resultados). Esta nueva versión llega de la mano de Kimberly Peirce (46) conocida por su debut en la película, “Los muchachos no lloran” de 1999 (tomada de un caso verídico). La ha modernizado un poco, dándole toques un poco más contemporáneo. Aquí se toca el tema del bullying (maltrato a jóvenes por parte de su pares) donde ella es la víctima, las redes sociales y un lenguaje diferente al de los ’70. La historia gira en torno a una joven de unos 16 años Carrie White (Chloë Grace Moretz "Kick Ass I y II", "Déjame entrar", "Sombras tenebrosas"), tímida, inocente, sobreprotegida por su madre, se ve disminuida ante todos y sus compañeras se burlan de su primera menstruación. Vive con su madre Margaret White (Julianne Moore) cautivada por la religión, ni siquiera sabía que estaba embarazada de Carrie, creía que era un cáncer, da a luz sola y de la misma manera cría a su hija, es una fanática religiosa que se autoflagela, se viste con ropa anticuada, vive despeinada y tiene su biblia siempre en la mano (y todo lo hace porque Dios lo dice, en fin una fanática religiosa). Carrie sufre, intenta saber que está pasando con su cuerpo y lucha con los creencias que le impone su madre, sus compañeros son crueles y la maltratan, quien le presta mayor atención es la profesora de gimnasia Ms. Desjardin (Judy Greer, "La aldea"; "Lo que ellas quieren") Sue Snell (Gabriella Wilde, “Los tres mosqueteros”) intenta hacer un trato para saldar su mala actitud. Tommy Ross (Ansel Elgort) es el joven atractivo que la invita al baile de graduación, Chris Hargensen (Portia Doubleday) solo quiere vengarse con la ayuda de Billy Nolan (Alex Russell), entre otros. Tanta es la presión que sufre Carrie que no tarda es descubrir y utilizar sus poderes de telekinesis para la venganza. Esta nueva adaptación se encuentra bien interpretada por la joven actriz Chloë Grace Moretz de 16 años, (en cambio cuando Sissy Spacek hizo este papel tenía 26 años de edad), Julianne Moore, una vez más se destaca, no intenta ser Piper Laurie (no tendríamos que comprarlas pero quienes las vieron lo harán con cada uno de los personajes). Este es un thriller psicológico, critica a la sociedad, a las redes sociales, contiene muchos efectos especiales y una buena banda de sonido, pero le falta tensión, terror y emoción, resulta una versión tibia para las nuevas generaciones.
Un grupo de Jóvenes aburridos buscan diversiones peligrosas. Inspirada en una historia real que sucedió entre octubre de 2008 y agosto de 2009, donde un grupo de adolescentes obsesionados con la fama en Los Ángeles roban en las mansiones de los famosos, en las colinas de Hollywood, averiguan por internet quienes son los que se van a encontrar ausentes de su domicilio, sus víctimas: Paris Hilton, Lindsay Lohan, Megan Fox, Orlando Bloom, Ashley Tisdale, Rachel Bilson, entre otros, y la banda se hizo conocida en los medios como “The Bling Ring”. Se estrenó en mayo en el Festival de Cannes 2013, a nivel nacional en Estados Unidos el 21 de junio y ahora llega a nuestro país. Estos jóvenes amigos para la aventura son: Rebecca (Katie Chang), Marc (Israel Broussard), Chloe (Claire Julien), Nicki (Emma Watson) y Sam (Taissa Farmiga), (los nombres de los personajes reales son diferentes), se hacen referencias a la página de facebook. Roban joyas, zapatos, indumentaria y todo lo que se encuentre de valor (vemos muchos sponsor), dinero, drogas, alcohol y excesos, tiene cierto toque psicológico porque ellos buscan parecerse a sus víctimas, en gran parte de su relato estos adolescentes están intentando encontrar su identidad. Este film es de la conocida directora y guionista estadounidense Sofía Coppola que a los 42 años sigue tan vigente como siempre (“Las vírgenes suicidas”, "Perdidos en Tokio", "Somewhere - En un rincón del corazón",…) es una experta a la hora de crear climas, sabe comunicarse con el espectador, suele elegir buenos elencos, aquí combina situaciones divertidas, dramáticas, tristes, tiene mucho humor y cierto lado oscuro. Contiene una buena banda sonora (tema "Crown on the Ground" de la banda Sleigh Bells; del rapero Kanye West, entre otras), estéticamente muy cuidada, tiene varios mensajes y una fuerte crítica al consumo, a la sociedad, la obsesión por la fama y el dinero, entre otras cosas. La historia falla un poco en el guión, dado que comienza con mucha fuerza pero va decayendo y si bien se basa en hechos reales muchos puntos no quedan en claro, no se conoce muchos datos de los personajes como familia y escuela, ellos ingresan a importantes mansiones con demasiada facilidad, no hay guardias, ni personal domestico, ninguna persona, nadie detecta rápidamente los robos y las cámaras de seguridad, ningún famoso sale a decir que han invadido su privacidad, ninguno de los padres de estos chicos se preguntan que hacen sus hijos, es raro. El rodaje se realizó entre marzo y abril de 2012 en los alrededores de Los Ángeles, especialmente en West Hollywood, Lynwood y Venice; algunas escenas se rodaron en la mansión de Hilton.
Cuenta la relación de amor entre dos hermanos. Llega este film de la mano del reconocido actor Guillermo Pfening, de larga trayectoria en cine, teatro y televisión. Ahora se lanza como director de largometrajes y cabe recordar que anteriormente se realizó un cortometraje con el título “Caíto” que logró el premio Georges Meliés en el 2004. Este film se encuentra producido por Pablo Trapero. Se desarrolla en Marcos Juárez (una ciudad del este de la provincia de Córdoba, Argentina), su ciudad natal y la inquietud de Pfening es cumplirle un sueño a su hermano menor Luis Caíto, (quien aún vive en esa Ciudad) ser protagonistas de una película, contando la rutina de una semana de su vida. La historia tiene un estilo de documental pero tiene también algo de ficción. Luis Caíto se moviliza en un cuatriciclo especialmente preparado dado que posee una capacidad motriz diferente, padece Distrofia Muscular de Becker. Y nace la inquietud también de mostrarle al público que por más adversa que sea la vida puede cualquier persona superarse y luchar por la vida. Ellos se unen para emprender una gran aventura, un sueño y a lo largo de su relato siempre está el amor, Guillermo Pfening busca el apoyo de varios actores (Romina Ricci, Bárbara Lombardo; Juan Bautista Stagnaro, Lucas Ferraro, entre otros), dentro de la cotidianidad vemos la relación con su padre, su empleada doméstica, su kinesióloga, sus amigos y las mujeres. Ambos hermanos se lucen frente a cámara, y al espectador no le dejan solo eso sino una lección de vida, donde está presente el compañerismo, la cordialidad, el cariño y la armonía, entre otros sentimientos. Caito tiene cerca de treinta años, vive con su padre y pese a estar rodeado de amigos, siente la necesidad de ser padre. La persona que puede cumplir su sueño es Suzuki (la chica fácil del pueblo), con ella mantiene varios encuentros. Y en el film eso se ve reflejado cuando Caíto se preocupa e intenta proteger a Anita (10) que vive en un hogar violento y él le ofrece su protección. La película ayuda aquellos que estén viviendo algún situación similar, la Asociación de Distrofia Muscular (ADM) nació hace más de 20 años (en 1983) debido a la inquietud de un grupo de padres y pacientes afectados por distintas enfermedades neuromusculares conjuntamente con médicos dedicados a su investigación y tratamiento intentando posibilitarles una mejor calidad de vida. La historia tiene momentos más logrados que otros, la ficción es lo más flojo, una buena fotografía mostrando un campo lleno de girasoles, la pampa húmeda, entre otras; no falta el humor, escenas de backstage, infaltables las anécdotas del rodaje que nos muestran el buen clima en el que se desarrolló la filmación. El film al fin y al cabo cumple con su objetivo principal.
Se habla de la muerte con humor y mucho respeto. Este film intenta que se reflexione sobre la muerte, los temores, el dolor que ocasiona la falta de algún ser querido y el peor de los casos es la de uno mismo, este es el punto del Director y Guionista Mazú cuando, a los 46 años, debió enfrentar su muerte, cuando tuvo un infarto sin darse cuenta, debía operarse e ingresar al quirófano, y todo lo que sucedió después. Le hicieron cuatro baypass y estuvo varias horas muerto, a raíz de eso dice haber perdido la inmortalidad, por lo tanto luego de ese momento sintió la necesidad de conocer un poco más sobre la muerte, cosa que cuando vivía no le interesaba pero después que se encontró al borde de la muerte comenzó a pensar que quiere que pase con sus restos, si pide ser cremado o ir a nicho, el espectador lo va siguiendo porque él además cumple con el rol de narrador y mentor. Otro de los integrantes del film y protagonista y quien relata gran parte de la película es Ricardo Péculo, Profesión Tanatólogo Matricula 373 otorgada por el Instituto Internacional de Ciencias Tanatológicas en Diciembre de 1991 y reconocido como Idóneo Director Funeral por la F.I.A.T. e I.F.T.A. (Federación Internacional de Tanatólogos Asociados). Dueño de una de las cocherías más famosas, es un especialista en Ritos Funerales, Pompas Fúnebres y Ceremonial, él explica que todos vamos a morir en algún momento y si no lo pensamos comencemos a hacerlo porque sucederá, muestra la elección de los ataúdes, la preparación de los muertos, hay varias anécdotas (entre ellas lo que le causó ver el cuerpo del General Perón). Su relato es dinámico, respetuoso y divertido, tiene bastante de humor negro, en varios pasajes del film vemos un ataúd que nos persigue por la calles porque en algún momentos vamos a necesitarlo, pese al tema que trata no aburre y después de los créditos hay escenas extras.
En esta nueva entrega y en consonancia con sus antecesoras nos enfrenta con: alienígenas, monstruos, mucha acción y un protagonista que continua vigente. Esta es una de las tantas historias que continúan, en este caso para entender mejor la trama tenes que haber visto las anteriores. Riddick (Vin Diesel) fue traicionado por su propia especie y dado por muerto en un planeta desolado y mal herido debe luchar por su vida, evitando ser comido por los gigantes dingos descriptos como unos perros salvajes estas criaturas quieren matarlo, logra escapar, pero el peligro continua y debe luchar con un gigantesco crap-scorpion, todas son una especie de criaturas prehistóricas. En ese suelo inhóspito intenta sobrevivir y allí adopta un dingo (un perro salvaje) que lo cuida y a medida que va creciendo será su compañero de ruta. Deben soportar todo tipo de inclemencias del lugar y no tardan en llegar dos grupos: uno de cazadores despiadados dirigidos por Santana (Jordi Molla) y otra tripulación dirigida por el Capitán Boss Johns (Matt Nable), donde se encuentra Dahl (Katee Sackhoff); ellos quieren capturar a Riddick por diferentes razones. El director y guionista norteamericano David Twohy (58) ya dirigió las dos anteriores "Pitch Black" (2000) y continuó con "Las crónicas de Riddick" (2004). A Vin Diesel (46) el personaje le sienta a la perfección lo conoce de memoria, además nos ofrece físico musculoso, mirada profunda y luminosa, su cabeza afeitada y su voz profunda. Ideal para los seguidores de la saga. Los actores secundarios se destacan algunos más que otros (Jordi Molla, Matt Nable, Katee Sackhoff, Dave Bautista, Raoul Trujillo, entre otros). Es una película de acción y ciencia ficción bastante predecible, hay luchas, está llena de personajes. La fotografía, la banda sonora de Graeme Revell y el montaje ayuda mucho a la trama, muchos efectos especiales, bastante sangre y gore, ironías, humor, algo de sexo y desnudez, violencia intensa, carece de una historia coherente, igual entretiene. Ya se está preparando la próxima entrega.
Una historia basada en hechos reales, ideal para los amantes del suspenso, la acción y las pelis de tipo biográfica. La historia gira en torno al Capitán Richard Phillips, un marino mercante, casado con Andrea Phillips (Catherine Keener) de profesión enfermera. Aunque no los vemos, por los diálogos de la pareja sabemos que tienen dos hijos y como casi todos los padres se demuestran preocupados por el futuro de los mismos. Se encuentra ambientada en abril de 2009, se despiden y Richard viaja junto a su tripulación en el carguero " MV Maersk Alabama" con bandera de Estados Unidos. Dentro del recorrido de dicho buque, él analiza a través de los mapas que se encuentra expuesto a algunos peligros. Mientras por otro lado un grupo de somalíes está planeando asaltar alguna de las embarcaciones que pasen por la zona y llevarse un botín millonario. Emprenden un viaje en una lancha cuatro piratas somalíes fuertemente armados para secuestrar dicho buque en el Océano Índico, logran apoderarse de esta embarcación, que casualmente transporta comida y agua para africanos, no llevan armas para defenderse porque no está permitido. La tripulación y el Capitán Phillips intentan no ser atacados, pero estos finalmente abordan el barco, asustando primero a algunos hombres, además tiran tiros al cuerpo y luego amenazan a todos. El Capitán intenta en todo momento tranquilizarlos, hasta le entrega 30.000 dólares, pero es tanta es la ambición que terminan pidiendo 10 millones de dólares secuestrando al Capitán y llevándolo de rehén en un bote salvavidas. Quienes intenten salvarlos deberán armar una buena estrategia. El director inglés Paul Greengrass es responsable de: "Resurrected"; "Bourne: el ultimátum"; “Vuelo 93”; “La ciudad de las tormentas” entre otras, por lo tanto nos encontramos frente a un cineasta que filma como los dioses, gran parte de la película se encuentra realizada con cámara en mano, lo que le otorga mayor tensión, acción, dramatismo y emoción. Tiene un gran realismo, no resulta aburrida, requiere mucha atención del espectador, te hace vivir cada secuencia y maneja muy bien el suspenso. Es una historia intensa con una gran carga psicológica, cuenta con un gran montaje que viene de la mano de Christopher Rouse ("Bourne: El ultimátum Bourne"; "Vuelo 93"), brillante la fotografía de Barry Ackroyd (“Vuelo 93” y ganador del premio Oscar por “Vivir al límite”), el director trabaja con un equipo integrado por gente que ya se conoce hace bastante. Disfrutamos una gran actuación de Tom Hanks (57), el espectador percibe: el coraje, sus emociones, esa sensación de asfixia, miedos, la congoja y el ahogo, ya ha ganado dos Óscar consecutivos como Mejor Actor: " Philadelphia" (1993); "Forrest Gump" (1994) y por esta interpretación merece ser nominado; le deberían dar un Premio Revelación al joven actor somalí de 28 años Barkhad Abdi (es su debut cinematográfico) interpreta a Muse uno de los piratas y se luce.
En estos tiempos modernos la frase “abran juego” se traslada al sistema online. Esta historia muestra una vez más lo que se puede hacer a través de las distintas páginas en internet, uno de los tantos ejemplos lo vimos en la película que se estrenó a fines de julio: “Ladrona de identidades” protagonizada por Jason Bateman y Melissa McCarthy, donde a través de una serie de preguntas una mujer va robando identidades y sumando víctimas. Aquí un joven Richie Furst (Justin Timberlake), realiza apuestas jugando al póker online, dado que él no se encuentra pasando un buen momento económico. Con la idea de ganarle al sistema apuesta el dinero de su matrícula para la Universidad de Princeton, pierde todo y descubre además la estafa. Para recuperar su capital, realiza un viaje fuera del país (la trama se traslada de Estados Unidos a Costa Rica) para conocer, denunciar a Iván Block (Ben Affleck), dueño de la página y multimillonario. A pesar de todo terminan trabajando juntos e ingresando al mundo oscuro de los juegos y las apuestas online, en un principio algo impensado, el protagonista se ve rodeado de lujos, fiestas increíbles, mujeres hermosas, todo el glamour y se vinculará además con corruptos, gánster, estafadores y agentes del FBI. El director es el americano Brad Furman, algunos lo recordarán por “Culpable o inocente” (2011), con: Matthew McConaughey, Marisa Tomei y Ryan Phillippe, (contaba cuando un abogado especializado en defender a criminales, le llega un caso y le causa consecuencias inesperadas). En esta oportunidad trabaja con Timberlake un actor que agrada sobre todo a las adolescentes y Affleck se destaca más como director (ganador del Oscar por “Argo”), que como actor pero juntos se complementan bien. El desarrollo de la trama es bueno, los primeros veinte minutos contiene un montaje dinámico, buenas locaciones, se manejan bien ciertos climas, entretiene, hay traiciones y piñas, tampoco falta una mujer hermosa, en este caso Rebecca Shafran, interpretada por Gemma Arterton, entre otras. Luego resulta previsible, personajes que desaparecen, a lo largo de los últimos minutos todo lo que comenzó a pura adrenalina se diluye.
Un film intenso que mezcla el thriller, ciencia ficción y drama. Ahora todo el vértigo se encuentra en el espacio. El universo siempre resultó atrayente para el humano, será porque todavía no logra conquistarlo en su totalidad y se continúan realizando diferentes investigaciones para esto. La primera persona en salir al espacio en toda la Historia fue el cosmonauta Yuri Gagarin en abril de 1961 a bordo de la nave Vostok y la primera mujer en volar al espacio Valentina Tereshkova, la cual salió al espacio en junio de 1963 a bordo del Vostok 6 y hasta el momento se continua buscando. A través del cine y la literatura también se muestra la misma inquietud como la película francesa de 1902, en blanco y negro, muda y de ciencia ficción "Le Voyage dans la Lune" de Georges Méliès, y otras que fueron surgiendo sobre el tema. Una de las que quedó en la memoria de varios espectadores es “2001: Odisea del espacio” dirigida por Stanley Kubrick. Desde su contenido, aborda temas como: la evolución humana, la tecnología, la inteligencia artificial y la vida extraterrestre. Este film se estrenó en Estados Unidos el viernes 4 y el fin de semana recaudó 55,6 millones de dólares batiendo records. Ahora llega a la cartelera Argentina “Gravedad”, la protagonizan solo dos personajes la Doctora Ryan Stone (Sandra Bullock) quien realiza su primer viaje espacial y un experimentado astronauta a punto de retirarse, Matt Kowalski (George Clooney). Ellos realizan una tarea de rutina, pero algo sale mal y se verán envueltos en una catástrofe, una inquietante situación que los encuentra solos en el espacio y sin ningún contacto con la Tierra. La interpretación de Sandra Bullock es tan buena que merece ser nominada a los Premios Oscar, te transmite esa sensación de asfixia, la falta de oxigeno. Están en medio de la nada y los sentimientos son de: angustia, ansiedad, miedo, preocupación, impotencia y la lucha por la supervivencia. Salen a la luz sus terribles pasados. George Clooney tiene química con el personaje de su compañera, le da tranquilidad, el control y le pone una gran cuota de humor. La trama contiene poco dialogo, son brillantes los momentos que solo se siente y se ve el espacio y a esos personajes en medio de la nada, que le quita el aliento al espectador, buen plano secuencia, muy bien filmada, la tercera dimensión le brinda mayor profundidad, ver ese universo inmenso, los satélites, las escenas catastróficas, tormenta solar, buenos efectos especiales, puro entretenimiento, emotiva, dramática, intensa, llena de suspenso e intriga, con una brillante banda sonora (Steven Price) en los momentos precisos y deslumbrante la fotografía de Emmanuel Lubezki.
Retrata el shock que vive una mujer rica cuando lo pierde todo y abruptamente se enfrenta con la realidad. La historia gira en torno a los días de Jeannette (Cate Blanchett), se cambió el nombre por Jasmine, porque parece más interesante, se encuentra casada con Hal (Alec Baldwin), un hombre de negocios. Ellos son ricos, viven llenos de lujos en una gran mansión, concurren a distintas reuniones de la alta sociedad, todo su estilo de vida es esplendoroso y nunca miraron a su alrededor pensando en aquellos que tienen poco o directamente nada. Muchas veces en la vida algún refrán popular se cumple y en este caso podríamos aplicar aquel que dice “Hasta los Castillos más altos han caído”. Vemos a Hal (Alec Baldwin) yéndose a la quiebra y a ella que se encuentra ajena a los negocios de su marido, solo se interesa por los lujos y no presta atención a las infidelidades de él. Quedan solos, sin amigos, denigrados y privados de aquellos que estaban en los momentos de esplendor. Y la penosa realidad es ver a esa mujer de la alta sociedad de Nueva York sin nada y totalmente en la ruina, lo único que le queda son vestidos caros y una cartera Vuitton. Ahora se ve obligada a viajar a San Francisco para pedirle a su hermanastra Ginger (Sally Hawkins) vivir con ella. En ocasiones anteriores Ginger la visitaba junto a su marido Augie (Andrew Dice Clay), se hospedaban en un hotel y Jasmine los despreciaba por su clase social. Ambas hermanas intentarán reencontrarse, encontrar una segunda oportunidad en la vida y en el amor. Jasmine (las situaciones conflictivas las soluciona con el alcohol y las pastillas) comienza a estudiar computación porque quiere ser decoradora de interiores, acepta un trabajo con un dentista enamorado, el Dr. Flicker (Michael Stuhlbarg) quien le trae complicaciones. Con su hermana intenta divertirse a través de salidas junto a Chili (Bobby Cannavale) el novio de Ginger y Eddie (Max Casella). En una fiesta de manera ocasional Jasmine conoce al encantador diplomático Dwight (Peter Sarsgaard). A medida que va corriendo la historia podemos observar todo un parque de diversiones de recursos desplegado por Allen y en el cual se destacan: los colores, las locaciones, los diálogos, la música, el amor, la delicadeza, el sexo, los celos, el humor sarcástico y las relaciones familiares y humanas. Mantiene todo el estilo de Allen (acá con una fuerte crítica a la burguesía), a la manera de una comedia agridulce encantadora. Tiene varios puntos en común con “Un tranvía llamado Deseo” la pieza de Tennessee Williams, pareciera ser un homenaje. Todo su relato lo vamos disfrutando a través de cuidadosos flashbacks, la actuación de la actriz australiana Cate Blanchett (44) es excelente, brillante (te despierta: ternura, repulsión, desprecio y lástima), merece ser nominada para los Premios Oscar, (la última escena te deja boquiabierto) este es su debut a las órdenes del director y el resto de los personajes se lucen.
Las obsesiones de un futuro director de cine que hace vivir a sus amigos una filmación macabra. Es interesante recordar que “Fenómeno paranormal” (2011) en nuestro país se editó directamente en video en mayo de 2012 bajo la dirección del guionista y director de” The Vicious Brothers” (no son hermanos solo amigos). La filmación continua siendo con cámara en mano (falso documental) y cabe recordar que dentro de este estilo ya vimos: “El proyecto Blair Witch” (este fue el más novedoso); “REC” y “Actividad Paranormal”; entre otras. La historia se centra en Alex Wright (Richard Harmon) un estudiante de cine que vive obsesionado con los hechos del pasado. Él se inquieta más cuando comienza a recibir llamadas anónimas y le llega un extraño vídeo de un bloguero llamado “DeathAwaits666” (justo esto ocurre la noche de brujas), allí se encuentra aquel viejo personaje Sean Rogerson (Sean Rogerson) en un instituto psiquiátrico de Collingwood. Este es el pretexto justo para hacer volar la imaginación y ver como Alex y sus amigos aventureros y bromistas: Trevor Thompson (Dylan Playfair) quien es el mejor amigo de Alex y camarógrafo, Tessa Hamill (Stephanie Bennett) amiga de Jennifer, Jared Lee (Howie Lai) es el otro camarógrafo de Alex y Jennifer Parker (Leanne Lapp) que está enamorada de Alex, llegan a Canadá, ingresan al lugar prohibido, lleno de misterio y no falta el que se burla de todo, la chica demasiado divertida y la locura en parte de todos. Todos nos encontramos en un lugar con poca luz, siempre con cámara en mano, se alumbran por momentos con una linterna, su iluminación va y viene, todo comienza a poblarse de presencias monstruosas, demoniacas, espectros, pasillos y distintos ambientes lúgubres, además utilizan la tabla de la ouija. La película está llena de sobresaltos, asesinatos sangrientos, ruidos atroces, por momentos parece que van todos en una especie de tren fantasma macabro, llena de efectos especiales, no cuenta con un gran guión, pero deja ingresar a los nuevos seguidores del género. Y con una vuelta de tuerca para darle entrada a la tercera parte, y convengamos que en YouTube se convirtió en un éxito, fue vista más de 24 millones de veces.