X-Men: Apocalipsis

Crítica de Alejandro Franco - Arlequin

Nunca me entusiasmaron demasiado los X-Men. Digo, he visto los dibujos animados y me han parecido una maravilla, pero los filmes de Bryan Singer son culebrones densos y excesivamente conversados. Le di gracias al cielo cuando trajeron a Matthew Vaughn - un tipo que sabe cómo hacer cosas cool - en First Class, y hasta parecía que Singer había aprendido la lección dando algo tan potable como Dias del Futuro Pasado... pero X-Men: Apocalipsis es un serio error de criterio. Lo poco que funciona se debe a un puñado de viejos conocidos - Fassbender, MacAvoy, el cameo de Hugh Jackman, el eterno ladrón de escenas Evan Peters - porque todo el elenco nuevo es descartable. Es un puñado de pendex sin carisma, elegidos por sus looks mas que por su capacidad de llenar la pantalla. La nueva Storm es una pordiosera punk sin carácter, Cíclope es un palurdo y hasta Jean Grey parece una pendex emberretinada en vez de ese animal sexual que era Famke Janssen. La nueva generación - versión joven de los X-Men tradicionales que conocimos en el 2000 - se ven como impostores y aportan tan poco que se ve como un relleno demasiado recalentado.
X-Men: Apocalipsis tiene dos estados: aburrido y banal o sobrecargado de efectos especiales hasta el paroxismo. El villano es genérico y sólo sabe gritar, a Magneto sólo le pasan desgracias - es tan absurda la escena en donde pierde a su familia (¿en serio lo atrapan con un juego infantil de arco y flecha?) que termina dando gracia - y por eso se vuelve malo, aparecen demasiados personajes poco interesantes (¿a quién le interesa los dramas familiares de Ciclope o Jean Grey?), y algunos caracteres tradicionales se ven desdibujados - de dónde salió que Raven es una lider nata para conducir masas y salvar a la humanidad de su ominoso destino -. Encima el final es tan estirado y absurdo que parece salido de una pelicula fantástica japonesa, ésas en donde todos gritan como histéricos, sacan recursos de la galera y los buenos no terminan de morir nunca.

X-Men: Apocalipsis es una pelicula fastidiosa. Los personajes toman decisiones arbitrarias - por qué Quicksilver no le revela a Magneto que es su hijo, si para eso se tomo la molestia de hacer semejante viaje -, y la derrota del villano es tremendamente arbitraria. Da la impresión de que los responsables de esto están aburridos de la franquicia y la cocinaron como se les dió la gana, dejando que la lógica saliera volando por la ventana. Hay demasiados personajes banales cuando lo mejor hubiera sido restringir todo a 5 o 6 - sobre todo los mas interesantes - y desarrollarlos con la profundidad que se merecían.

Siendo cinico, diría que X-Men: Apocalipsis es un filme capaz de destruir la franquicia X-Men. Aburre y satura, y no tiene el enganche de las entregas anteriores. Es momento de que Singer se vaya de la franquicia y que el que venga, vuele a la mitad del cast ya que parece salido de Crepúsculo. Ni uno de los recien llegados vale la pena y da la impresión que el director de casting se pasó de copas, ya que terminó por reclutar a cualquiera... afectando la prestancia de alguno de los personajes mas importantes de la tira, los cuales se transforman en pálidas copias de los originales.