Winnie the pooh

Crítica de Pedro Squillaci - La Capital

El osito pura ternura

Winnie The Pooh es uno de los personajes más entrañables de la factoría Disney. En este filme, el osito hace lo que mejor sabe hacer: mostrar su obsesión por la miel, su objeto del deseo. Acompañado de sus amigos, Tigger, Igor, Conejo, Piglet y Búho, caerá como al descuido en medio de una misión impensada: salvar al querido Christopher Robin de un inconveniente un tanto especial. Lo más atrapante del filme es que se trata de un cuento simple, con una historia que cierra por todos lados y que, lo más importante, los chicos se sentirán sumamente reconfortados. Si algo tiene de atractivo el personaje Winnie The Pooh es su inocencia y ternura, características que, en un acierto de los realizadores, son resaltadas a lo largo de los 64 minutos, un tiempo más que suficiente para que la película evite transitar mesetas narrativas. Incluso, hasta por su buena dosis de ingenio, el filme se hace entretenido para los más grandes.