Valiente

Crítica de Jonathan Santucho - Loco x el Cine

El corazón valiente de Pixar.

Continuando un buen año para los personajes femeninos en el cine hollywoodense, llega Valiente (Brave, 2012), la nueva realización de Pixar (responsable de clásicos como Toy Story, Monsters Inc. y Los Increíbles), que se destaca por esa peculiaridad: esta es la primera película del estudio protagonizada así como dirigida por una mujer (Brenda Chapman, quien igualmente fue reemplazada por Mark Andrews a la mitad de la producción). El resultado de esta corriente es un film que, si bien no llega al estándar usual de calidad para la productora, es un muy buen entretenimiento para niños y adultos.

Situada en Escocia durante la Edad Media, Valiente cuenta la historia de la princesa Mérida (voz de Kelly Macdonald), que no muestra agrado por las tradiciones y expectativas puestas en su rol real por su madre, la reina Elinor (Emma Thompson). A pesar del esfuerzo por las dos en comunicarse, ambas mujeres no logran entenderse entre sí, lo que complica la llegada de los clanes aliados al reino, dispuestos a competir por la mano en matrimonio de Mérida. Tras oponerse a la unión por conveniencia y desafiar a todos, la rebelde princesa huye a lo más profundo del bosque, buscando una forma de cambiar el destino que fue puesto sobre ella desde su nacimiento. Justo en ese momento, encuentra un misterioso camino que la lleva a la cabaña de una bizarra bruja (Julie Walters), quien le promete alterar a su madre. Mérida acepta, pero pronto se da cuenta de que ha causado una gran maldición, y se pone en acción para volver las cosas a la normalidad y poner las cosas en claro con Elinor antes de que sea demasiado tarde.

Lo primero que se debe destacar sobre la película es el gran éxito por parte de los responsables al crear el clima de Escocia y de sus leyendas. Como en toda producción de Pixar, la animación es impresionante, ya sea la del territorio de las Tierras Altas, así como la de Mérida, cuya cabellera pelirroja no necesita de las tres dimensiones para saltar de la pantalla. Además, el elenco de voces fascina con las actuaciones y el idioma de la región, justificando totalmente la visión del film en su versión original. Y, se debe repetir, es bueno ver a dos personajes femeninos tan bien desarrollados como Mérida y Elinor. Si bien la primera usa un poco del modelo de “princesa de Disney”, vale la pena observar a personajes que luchen por la igualdad entre la gente y la individualidad de las acciones propias.

Por desgracia, la producción no logra alcanzar el nivel de los clásicos de Pixar. Si bien los personajes mencionados logran destacarse, la historia es muy conocida, lo que arruina un poco los logros hechos por su predictibilidad. Eso frustra principalmente porque el film construye en su primera mitad una promesa de grandes aventuras, pero una vez que se aplica el hechizo sobre Elinor, se toma un rumbo hacia lo conocido, lo que hace que las escenas humanas (el gran fuerte del estudio creador de Woody y Buzz) no funcionen como deberían. Además, es necesario aclarar que no vale la pena ver la película en 3D: no se destaca para nada, solo quitando brillo de la excelente animación.

Entonces, Valiente es una historia familiar que es muy bien contada. A pesar de su familiaridad, la animación, los personajes y el humor de Pixar se mantienen intactos, lo que hace que sea una gran recomendación si se quiere ver en familia. Un último consejo: asegúrense de llegar temprano al cine, para poder ver el gran corto La Luna, escrito y dirigido por Enrico Casarosa. En siete minutos, resume la magia, la poesía y la humanidad que representa el estudio de John Lasseter, que ojalá siga creando historias maravillosas.