Un lugar en silencio

Crítica de Leonardo M. D’Espósito - Revista Noticias

90

Sorpresa enorme en la cartelera. Esta película de terror, segunda obra como director de John Krasinski, narra la vida de una familia en un bosque. Los vemos moverse con sigilo y en completo silencio. Los vemos hablar con señas -la niña de la familia, son solo cuatro personajes, es sordomuda- y descubrimos que alrededor viven monstruos. Mientras no emitan sonidos, están a salvo, pero como corresponde algo sucederá y aparecerá el peligro mortal. Todo el film es un gigantesco ejercicio de puesta en escena cuyo virtuosismo pasa inadvertido porque se integra completamente a la trama. Hay miedo en cada plano, sin que aparezca la truculencia o la sangre desborde. Estamos lejos del susto por el susto mismo, y bien dentro del verdadero cine de terror, el de exacerbar los miedos primarios (no hay peor que temer que le suceda algo malo a un hijo, a un niño) para que reflexionemos sobre nuestra parte más primitiva. El uso del sonido -o la falta de sonido- de modo dramático está dentro de los más virtuosos de los últimos tiempos. Sería bello que una película al mismo tiempo entretenida y arriesgada, clásica y moderna, encuentre el público que merece. Si no gusta del género, también es una buena oportunidad para acercarse a él. De lo mejor de lo que va del año.