Un amor en tiempo de selfies

Crítica de Santiago García - Leer Cine

DRAMA Y PATETISMO CON DISFRAZ DE COMEDIA ROMÁNTICA

Es un lugar común creer que hacer comedias románticas es algo fácil. Tal vez por eso el cine argentino se ha volcado en los últimos años a probar suerte en este tan taquillero género. En un principio Un amor en los tiempos de selfies parecía ser parte de esta tendencia. Así arranca y así lo sugería el título del film. Lucas es un cómico stand up y profesor de teatro. Guadalupe es una ejecutiva que toma clases con él para poder aprender a hablar en público. Son diferentes, pero todo indica, como ocurre en las comedias románticas, que se van a enamorar. Los lugares comunes se suceden, no por el género, sino por la forma en que se describen los personajes. Sin embargo aquello que arranca como una comedia romántica se transforma con el correr de los minutos en otra cosa, más dramática, y el protagonismo se va inclinando hacia Lucas, demostrando una vez más que en el cine argentino aun hoy cuesta hacer un cine sobre pareja que no esté centrado en el protagonismo masculino. Los personajes son distintos, pero el conflicto y las diferencias no los vuelven graciosos ni simpáticos, al contrario. Poco a poco, escena tras escena, tanto Lucas como Guadalupe se van transformando en personajes poco agradables. Lucas en particular termina siendo agresivo y maleducado de una manera inesperadamente violenta. Un amor en los tiempos de selfies no es una comedia romántica, está claro. Tampoco es un buen drama, por lo que queda entre dos géneros, generando poca empatía y desembocando en un final cuyo patetismo está tanto dentro como fuera de la trama de la historia. Algunos leves chispazos de humor apena disimulan una película muy difícil de sobrellevar, cuya intención de seriedad la vuelve peor que su ligereza inicial. La comedia no logra nunca encontrar el tono pero cuando aparece el drama se extraña esa comedia fallida inicial. Un único detalle interesante pero que lamentablemente está desperdiciado: la incidencia de las redes sociales en los vínculos humanos actuales. Muy poco para esta película que no cumple ni con la comedia ni con el drama.