Un amigo abominable

Crítica de Diego Curubeto - Ámbito Financiero

Una chica china solitaria, dispuesta a cualquier trabajito para emprender el viaje al Himalaya que había planeado con su padre difunto, se encuentra con un Yeti en la terraza del edificio en el que vive. La primera coproducción entre Dreamworks y los estudios chinos de animación Pearl van a lo seguro, con una historia elemental pero no carente de atractivo visual y muchos paisajes orientales en versión animada. La trama es minimalista, con el Yeti perseguido por un coleccionista de animales que lo quiere atrapar, y la chica que logra hacerse de amigos para liberar al encantador abominable y llevarlo al Himalaya con su familia. La película empieza un poco lenta y con demasiados toques emotivos, pero a medida que avanza el viaje al Tibet las cosas se ponen más movidas y a veces entretenidas para los más chicos.