Todo el dinero del mundo

Crítica de Diego Curubeto - Ámbito Financiero

Radiografía del famoso secuestro de Paul Getty III

La historia del secuestro del nieto de Paul Getty, el hombre más rico del mundo que, sin embargo, se negaba a pagar el rescate ni aun luego de que le mandaran una oreja del sufrido Paul Getty III, fue una de las noticias internacionales de la década del 70 y sigue siendo un modelo de los niveles a los que puede llegar la avaricia de algunas personas.

Y, justamente por eso, el relato tiene como villano principal no tanto a los delincuentes que cometen el secuestro, sino al millonario al que le piden que pague el altísimo rescate. El personaje iba a estar interpretado por Kevin Spacey, que en una decisión inédita en Hollywood fue borrado del film y suplantado por Christopher Plummer, quien realmente podría haber sido la primera opción, dados su talento y edad, perfecta para el papel.

Si bien se supone que Ridley Scott retomó cada escena con el personaje de Getty durante las más de dos horas de film, por momentos se extraña la presencia de este personaje clave que aparece bastante menos que el de Michelle Williams, la desesperada madre del adolescente secuestrado. Por eso, "Todo el dinero del mundo" luce como un gran thriller dramático en busca de un protagonista que refleje adecuadamente el nudo del relato. Detalle que no impide que una historia atrapante como ésta, filmada por un obsesivo como Ridley Scott, funcione extraordinariamente bien. Todas las actuaciones son notables (incluyendo a Charlie Plummer, que no es pariente de Christopher, como el joven secuestrado), y hay imágenes atractivas, y también algunos momentos esteticistas en los que el director parece querer aprovechar que la acción transcurre en Italia para copiar clásicos de Bertolucci.Pero más allá de esos detalles es un film digno de verse.