Tinkerbell: Hadas al rescate

Crítica de Claudio Lo Iacona - Todo lo ve

Un hada en apuros

Los estudios Disney siempre nos sorprenden con sus films, si no es desde lo visual, es por lo novedoso o, como en este caso, con una pequeña historia y sin la necesidad de apoyarse en los efectos del 3D. El resultado es un buen producto que hace pasar al espectador un buen momento.

El director Bradley Raymond junto con Bob Hilgenberg y Rob Muir se ocuparon del guión de esta aventura que cuenta las andanzas de Tinker Bell (Campanita) durante su estancia de verano en Tierra Firme.

El film animado narra cómo la inquieta Campanita es descubierta accidentalmente mientras investiga una pequeña casa de hadas que una niña construyó con sus propias manos. Mientras el resto de las hadas -con Vidia a la cabeza- organiza un gran operativo de rescate en medio de una feroz tormenta, Tinker Bell forja una amistad muy especial con la pequeña y solitaria chica.

Decidida a reparar la relación entre la pequeña y su padre ausente, Campanita rechaza el rescate de las hadas para ayudar a su nueva amiguita, poniendo en riesgo su propia seguridad y el futuro de todas las hadas.

Esta película plagada de ternura y amistad es ideal para edades tempranas y niños no mayores de ocho años –los adultos presentes también la disfrutarán- ya que juega con la ilusión y la imaginación de los infantes. Pero a los padres los hará reflexionar sobre el valor que tiene el tiempo dedicado a sus hijos.

Tinker Bell explica que un hada surge en el momento que un bebe se sonríe por primera vez y que cada una tiene una ocupación en especial. Ella se encarga de reparar cosas, pero podrá reparar esta relación entre padre e hija?