Polvo de estrellas

Crítica de Susana Salerno - N3F

La obsesión por la fama y muestra lo más oscuro del ser humano en una historia coral.

Creo que siempre es bienvenida una película del cineasta canadiense David Cronenberg (“Una historia violenta”; “Promesas del este”; “Un método peligroso”) su filmografía es audaz, provocadora, maneja muy bien el gore, lo turbulento, es mordaz y cruel, y sabe llevar al cine grandes novelas, un claro ejemplo es lo que hizo con las de Stephen King, entre otras.

Lo que nos muestra en esta ocasión es una comedia bien negra y una sátira donde cuenta la decadencia y degradación, haciendo una cruel radiografía de ciertas figuras de Hollywood y lo que cuesta la fama y lo que son capaz de hacer por ella. Nos encontramos frente a una actriz llamada Havana Segrand (Julianne Moore), que quiere volver al cine pero no le quieren dar el papel porque ya es grande, y ella se encuentra desesperada con esto; desea encarnar a su madre (en una remake), quien fue una gran actriz, (ella tuvo una mala relación esta), es neurótica, toma pastillas y por momentos se deprime, y contrata al terapeuta de moda, un especie de gurú: el Dr. Stafford Weiss (John Cusack).

Otros de los personajes son dos hermanos: Benjie Weiss (Evan Bird) de unos 13 años, que representa al actor de moda, insoportable, maltrata a todo el mundo, insulta, es competitivo, se lleva muy mal con sus padres, y su hermana Agatha Weiss (Mia Wasikowska, "El secreto de Albert Nobbs”) lleva las marcas del fuego en su piel después de un accidente, acaba de salir del manicomio, llega a Los Ángeles y tiene fascinación por conocer al jet-set, terminando como asistente de la diva Havana. Agatha conoce allí a Jerome Fontana el chofer de la mansión que maneja la limusina y tiene aspiraciones artísticas (Robert Pattinson, vuelve a trabajar con Cronenberg).

Todo gira a través de la mirada de estos dos hermanos que solo buscan fama y un lugar en el mundo de las estrellas. La historia resulta atrapante, tiene intriga, suspenso, sexo, violencia, gore, maldades varias, sangre, drogas, escatología (alguna de las escenas se muestra el momento más íntimo cuando está en el baño estreñida. Hasta se ha llegado a vender la materia fecal de algún actor), lesbianismo, ver el lado oscuro de los actores, retrata la realidad, muy interesante y despiadada.

Cuenta con destacadas actuaciones, y el trabajo sobresaliente de Julianne Moore (está pautado el estreno en Estados Unidos para el 27 de febrero 2015, por lo tanto podría ser nominada a los Premios Oscar en 2016), en una actuación magistral. Es una sátira que toca temas como: el precio de la fama, la obsesión por la popularidad y como influye Hollywood en la cabeza de estos personajes. Con un toque surrealista, se muestran todas las miserias humanas mediante diálogos fuertes (el director a la hora de mostrar no se priva de nada), una dura mirada a la sociedad de consumo y toques psicológicos sobre los aspectos más ocultos y perversos del alma humana. No es lo mejor de Cronenberg pero es grato de ver este film.