Ojalá vivas tiempos interesantes

Crítica de Diego Curubeto - Ámbito Financiero

Bizarras aventuras de un escritor angustiado

Un escritor de libros infantiles decide cambiar de género (literario), por lo que se queda sin trabajo, y luego sin novia. Cuatro años más tarde, intenta infructuosamente escribir una novela, mientras sobrevive como vendedor de drogas. Para salir del bloqueo creativo, viaja a Canadá, y de golpe descubre que la lista de cosas que debe hacer antes de sacar la visa podría ser la novela que hace tanto intenta escribir.

"Ojalá vivas tiempos interesantes" es una comedia del absurdo que se vuelve más y más negra a medida que avanza la enroscada trama que, hacia la mitad, se enfoca en lo policial y macabro. En realidad, el director Santiago Van Dam no parece decidirse en hacer foco en nada en particular, salvo el personaje central, bien interpretado por Ezequiel Tronconi, casi el protagonista absoluto que prácticamente ocupa cada plano del film. Como no hay intención naturalista, el asunto funciona mejor cuando el desvarío fluye lejos de la trama principal dando lugar a escenas asombrosas, como una de baile flamenco que justifica por sí sola el precio de la entrada. Luego, si bien el conjunto tal vez no sea homogéneo, siempre está bien filmado y actuado, e incluye momentos visuales creativos, como un par de atractivas escenas de animación.