Nacidos vivos

Crítica de Fernando Sandro - El Espectador Avezado

Se acerca una de las fechas más negras de la historia argentina, 24 de marzo, y siempre en estos momentos suelen estrenarse películas ya sean ficciones o documentales afines con la temática de la última dictadura militar en nuestro país.
Por esta razón, la primera expectativa al ver un documental como Nacidos vivos es la de encontrarse con un fresco que evidencie uno de los máximos horrores ocurridos durante esos ochos años, el robo y sustitución de identidad de bebés.
Sin embargo, aquí está el primer impacto, "Nacidos vivos" no se limita solamente a hablar de ese terrible período. El trabajo de Alejandra Perdomo, de reciente paso por Pantalla Pinamar donde tuvo un recibimiento emocionante, arroja un dato, una cifra que desmorona, el robo y/o venta de bebés con el subsiguiente cambio de identidad afecta a más de 3.000.000 de ciudadanos en Argentina.
Perdomo captura el testimonio de adultos que en pasado sufrieron este atroz crimen y que ahora buscan reencontrarse de alguna manera consigo mismos. Para esto se rescata la labor de varios intervinientes y factores actuales que en cierta forma ayudan a que ese descubrimiento sea posible.
La creación de la Oficina de Derechos Humanos en el registro Civil de la Ciudad de Buenos Aires es un avance enorme, y así lo evidencian las palabras de su fundadora Mercedes Yánez. También tendremos la oportunidad de oir a otra gran luchadora Eva Giberti, todo una voz de la experiencia en temas infantiles, ahora a cargo de la Oficina de adopciones.
Algo fundamental en "Nacidos vivos" es que pone en primer plano la emoción, la esperanza, sin dejar de lado reclamos como el que se considere a este crimen como de lesa humaniodad.
No hay aquí banderías políticas ni militancias, si bien se reconoce un gran avance en los últimos tiempos. Por supuesto, si bien no es lo único, habrá testimonios de aquellos jóvenes que fueron sustraídos durante el último período de facto, es inevitable, y hasta ocupan un lugar central; pero también “la acción” logra trasladarse hasta España para hablar de las mismas cuestiones.
Párrafo aparte para la banda sonora omnipresente y valerosísima a cargo de la ex Blacanblues Viviana Scaliza, uno de los grandes aportes del documental, quien también ofrece su testimonio como víctima de este delito.
"Nacidos vivos" mezcla dolor, desesperación, angustia, pero también esperanza y una cierta amarga alegría para quienes lograron cerrar su círculo (si es que esto es posible). Un gran trabajo de investigación y recopilación de Perdomo, de visión indispensable en estas fechas y siempre, estas heridas no pueden prescribir.