Los labios

Crítica de Juan Pablo Russo - EscribiendoCine

Algo por cambiar

Premiada en Cannes y en el BAFICI Los labios (2010), dirigida por el binomio compuesto por Iván Fund y Santiago Loza, propone una nueva mirada sobre las formas narrativas utilizadas en el cine. En éste caso, lo hace a partir de un conflicto realista casi documental en la que puesta y realidad se unifican para dar cabida a un relato furioso sobre la indigencia social y la marginalidad en una Argentina olvidada.

Tres mujeres se dirigen hacia un pueblo perdido en medio de la urbe, ellas se dedican a curar, investigar, ayudar, a hacer lo que pueden y las dejan. Esas mujeres casi sin recursos hospitalarios nos irán llevando a través de un recorrido casual por las falencias en el sistema de salud y de la seguridad social de un país que por momentos suena a contradictorio.

La cámara vertiginosa de Iván Fund y el extremo cuidado estético de Santiago Loza se funden en un relato que, sin ser de denuncia, termina por poner en el banquillo de los acusados las faltas y equívocos de una clase dirigente preocupada por cierta banalidad superflua, aún sin proponérselo y es ahí en donde radica la verdadera inteligencia del film.

Los labios está compuesto de dos relatos. Uno ficcional conformado por el trío protagónico de mujeres que llevarán adelante por medio de la entrevista el segundo relato conformado por otras mujeres que contarán sus historias verdaderas. Una vez más se quiebran los límites entre ficción y documental dando lugar a un género hibrido, inclasificable, que justifica la existencia del cine como vehículo social.

Sin sensiblerías, sin tendenciosidad, con sólo una cámara y una historia, Los labios vuelve a mostrar que con talento se puede acceder la verdad sin caer en el patetismo de lo amarillento. Un cine comprometido con la ficción y con la realidad.