Las aventuras de Sammy

Crítica de Pablo Raimondi - SI (Clarín.com)

Un viaje oceánico

Sammy es un simpático tortugo quien ya desde su nacimiento, como cualquier quelonio marino, tiene que luchar para llegar desde las profundidades arenosas hasta el mar. A partir del kilómetro cero de su vida, la tridimensionalidad sumergirá al espectador (y especialmente a los niños) en un mundo de fantasía.

Las aventuras de Sammy: en busca del pasaje secreto recorre las primeras cinco décadas de vida de Sammy que se topará con coloridos personajes como, por ejemplo Ray, un tortugo histriónico, intrépido y algo vanidoso que cuida al protagonista durante sus primeros años de su vida en las aguas. También asomará Fluffy, un gato que convive con una comunidad hippie que cuidará de Sammy cuando este se extravía. Y quizás el eje de esta película es Shelly, la tortuga que le roba el corazón a Sammy y él atravesará mares enteros (bordeando estas costas australes inclusive) para dar con su amada.

La película además baja un mensaje ecologista donde el ser humano tiene un rol de mal necesario. Manchas de petróleo, bolsas plásticas, cazadores furtivos, entre otras crueles consecuencias de la mano del hombre, harán que Sammy y sus amigos reflexionen sobre el papel de los humanos en este mundo. Pero sin caer en la crítica exhaustiva.

Las aventuras de Sammy… es sin dudas una excelente opción para disfrutar en familia de la tecnología 3D. Sumergirse y dejarse sorprender.