La vida después

Crítica de Adolfo C. Martinez - La Nación

Un pasado desconocido que se revela

Tras años de un buen matrimonio, Juan y Juana deciden separarse, aunque la adaptación a la nueva vida no les resulta fácil, ya que todavía quedan retazos de amor, especialmente en él, un escritor taciturno e introvertido que muere poco después. Juana no puede reprimir su dolor y se ampara en la soledad de su casa, donde están los manuscritos de Juan, para una futura novela, a través de los cuales descubre una zona insospechada del pasado de él.

El film ahonda en esos sentimientos, contradictorios muchas veces, que se descubren al mirar al otro desde una perspectiva diferente y hasta encontrando puntos de atracción desconocidos. El replanteo de todo lo vivido es lo que se halla en el trasfondo de esta historia.

El director cordobés Franco Verdoia y el bonaerense Pablo Bardauil lograron construir ese clima tenso y por momentos violento en el que se mueven estos personajes. María Onetto logra penetrar en esa mujer que descubre lo que nunca había pensado de su marido, mientras que Carlos Belloso, alejado de sus habituales tipos, compone con calidez a ese escritor envuelto en el misterio.