La mujer sin piano

Crítica de Diego Batlle - Otros Cines

Después de hora

Con su segundo largometraje, el madrileño Rebollo (director de Lo que sé de Lola y actualmente en plena posproducción de El muerto y ser feliz, rodada en varias provincias de la Argentina) ganó el premio al mejor director y el galardón Nueva Mirada de TVE en el Festival de San Sebastián 2009.

En La mujer sin piano, se sumerge en las experiencias de Rosa (Carmen Machi), una ama de casa/depiladora ya madura que decide cortar con una existencia gris, tediosa y previsible, calzándose una peluca y saliendo a conocer la noche madrileña.

Durante ese "después de hora" (es la crónica de un día en la vida de...) descubrirá bares y hoteles, prostitutas e inmigrantes, violencia, incomunicación, soledad, sordidez, burocracia, represión y un mal humor generalizado. También mantendrá una fugaz relación (no tanto erótica sino confesional) con un trabajador de la construcción polaco tan simpático como patético. Austera, sensible, tierna y melancólica. Divertida y triste a la vez.