La cabaña del diablo

Crítica de Jorge Marchisio - Alta Peli

La Cabaña del Diablo nos muestra a un grupo de personas que quedan aisladas y deben no solo soportar una tormenta, también una presencia sobrenatural.

No hay que ser curiosos
Tras intentar recomponer la relación con su hija, un viudo, su nueva novia y los compañeros de trabajo de la joven Jill, sufren un accidente en los caminos rurales colombianos en plena tormenta. Tras refugiarse en un enorme caserón aislado, se darán cuenta que las inclemencias del tiempo es el menor de sus problemas; ya que dentro de la mansión se encuentra encerrado el mal mismo.

Tu historia me suena
La Cabaña del Diablo puede ser de esas películas que no importa el nombre, la trama en sí parece que ya la vimos en cientos de films similares, y peor aún, con nombres bastante parecidos a su titulo en castellano (mal trabajo de quienes lo tradujeron). Y lamentablemente ese “puede ser” inicial se transforma en una rotunda afirmación después de que terminamos de verla.

Así es como vamos a ver actores desconocidos aislados en alguna casa en el medio de la nada, en una locación x (acá dicen que es Colombia, pero podría ser cualquier otro país del mundo y el resultado sería el mismo) y un elemento sobrenatural al que los protagonistas se deben enfrentar casi sin cuestionarse nada, en lugar de salir corriendo y no volver nunca más.

Pero lo que me llama más la atención, es que decidieran situar la trama en Colombia, como si eso aportara algo a la historia en sí; y más dudas tenemos cuando vemos a los personajes hablan en un castellano que se acerca más al dialecto mexicano que al colombiano; y tampoco se usa la cultura o costumbres del lugar como para darle un contexto, o despegar un poco la historia de varias cintas parecidas que ya vimos.

Pero el principal culpable de que esta sea una peli del montón, es el propio director Víctor García; quien tenía la oportunidad de realizar un film personal, de insinuar bastante y jugar con los espacios (casi todo el film pasa en el interior del enorme caserón); pero no, su dirección es bastante discreta y no solo no sabe usar la claustrofobia del lugar, no duda a la hora de mostrar innecesariamente; logrando que estemos la típica dirección que parece hecha por un estudiante de primer año de cine.

Conclusión
Poco queda para destacar del film. Quizás en sus tramos finales se le agrega una regla a la lucha contra el mal que si se hubiera sabido de entrada, o si estuviera mejor explotada, hubiera ayudado bastante más a un producto final muy plano y chato. La Cabaña del Diablo va a estar en esas maratones de películas de dudosa calidad en los canales de cable que ya todos nos imaginamos, siendo recordada mas como “esa peli, la que pasa en Colombia y hablan en mexicano” que por algún merito cinematográfico. Una lástima.