Inevitable

Crítica de Amadeo Lukas - Revista Veintitrés

El amor en los ’80

La reciente colaboración de realizadores españoles con el cine argentino ya ha entregado algunos títulos de real valía, como Atraco! y Séptimo, y ya sea haciendo participar a intérpretes de aquí o rodando en nuestro país, esta integración está rindiendo sus frutos. En el caso de Inevitable, el director Jorge Algora, responsable de la atrayente El niño de barro, aborda una trama completamente distinta, aunque también un extraño pero hipotético crimen se produce. Inspirándose en una obra del notable autor Mario Diament, esta película vuelve a poner a Darío Grandinetti en un protagónico fílmico, acierto que se extiende a otros intérpretes talentosos como Federico Luppi y Antonella Costa.

Ubicada en unos indeterminados años ’80, el film propone devaneos amorosos, filosóficos, psicológicos y hasta metafísicos, en una amalgama que, con inteligencia y sensibilidad, no se aparta de la peculiar línea narrativa pero que podría haber dado aún para más. En medio de un matrimonio desgastado y una muerte cercana, el protagonista tomará decisiones inesperadas, que sacudirán sus vínculos y su vida rutinaria, mientras que un escritor ciego (referencia clara a Jorge Luis Borges) intervendrá otorgándole nuevos devenires a la historia. Un estupendo Grandinetti, pleno de matices, junto a una Costa intrigante y bella, comandan un elenco en el que también se destaca la española Mabel Rivera.