Hamdan

Crítica de Diego Curubeto - Ámbito Financiero

Flaco favor a la causa palestina.

El monótono relato en off en árabe del ex líder palestino Hamdan Ali Mahmoud Sefan recorre casi todo este documental dedicado a reconstruir un episodio histórico acaecido entre las décadas del 70 y 80 sin apelar al más mínimo material de archivo que aporte algo de evidencia a la historia, algo que desde ya explicita la total ausencia de objetividad del proyecto.

El relato en off suele ser escuchado sobre imágenes casi estáticas, o imágenes de rutas, o incluso de las cortinas de tela de un micro. Por momentos la cámara también recorre pasillos de cárceles o de pueblos palestinos, lo que en momentos culminantes permite que el relato en off desaparezca sin ser reemplazado por nada salvo sonido ambiente.

Hamdan explica que pertenecía a una organización clandestina, que llevaba material explosivo y que debía adoctrinar a un nuevo miembro para que ejecute una importante misión. El discípulo hizo explotar un micro en Tel Aviv, lo que no era su misión, pero que llevó a la detención del narrador. Curiosamente, según él mismo explica, fue declarado culpable de perteneer a una organización clandestina, de tener material explosivo y de adoctrinar al miembro que hizo explotar el micro.

Hamdan recuerda perfectamente detalles tan específicos como el plato de lentejas que comió antes de su detención, pero nunca menciona si la explosión del micro provocó alguna víctima.

También relata historias muy dramáticas sobre el maltrato y las torturas por parte de las autoridades israelíes. El tío del discípulo que aparentemente hizo explotar el micro habla a cámara repitiendo que no sabía nada de nada, y el momento más humano y pasional lo aporta la madre de Hamdan, que en la mitad de su extenso reportaje a cámara sin cortes de montaje, donde cuenta maltratos y hasta la falta de un trago de agua se interrumpe, risueña, "ahora tambien tengo la boca seca", dice.

Obviamente este documental parte de la base de que el punto de vista israelí no merece ser mencionado en este conflicto, ni siquiera al modo irónico de los grandes clásicos del cine político, pero si fuera un film de propaganda sobre la causa palestina, quizá haya sido infiltrado, dado que casi todo aquel que vea esta película no querrá saber más nada sobre el tema por un buen tiempo.