Este es el fin

Crítica de Rodrigo Chavero - El Espectador Avezado

Tuvimos suerte. “This is the end” originalmente estaba pensado para ir a dvd directo, pero por esas cosas del destino, aterriza en sala este jueves. Podemos ir preparando la fiesta.
Créanme. Seth Rogen y Evan Goldberg, luego de varios hits como guionistas, debutan con una propuesta lisérgica, bizarra y delirante que, si bien no es perfecta ni mucho menos, es lo suficientemente atractiva para hacernos pasar un buen momento. Para empezar, a las cosas, hay que llamarlas por su nombre.
O sea que todos los actores que participan de “Este es el fin”, actúan de… ellos mismos!!! Y no son pocos eh! Anoten el line up: James Franco, Johan Hill, Michael Cera, Craig Robinson, Jay Baruchel, Christopher Mintz-Plasse y Emma Watson, con algunos cameos extras (el de Channing Tatum… sin palabras!), un auténtico seleccionado de primeras figuras de la comedia americana actual.
El guión es una excusa. Si es que lo hubo (cosa que dudamos!). Todo comienza con una reunión de dos amigos que hace tiempo no pasan tiempo juntos, toma temperatura en la casa de Franco (que se ve hace buenas partuzas) y luego, simplemente, llega el apocalipsis.
¿Cómo? Sí, eso. La tierra se abre, algo malo (que no se sabe muy bien que es y porqué sucede) se hace presente y la destrucción llega al acomodado barrio donde están nuestras estrellas.
La idea es que, primero ellos se refugiarán en la casa y pasado un tiempo, tratarán de buscar ayuda en el exterior cuando las provisiones se acaben.
“This is the end” presenta mucho humor inflamable, incorrecto y de mal gusto. De tanto en tanto, hay alguna secuencia elaborada con ingenio (la de Gangnam Style es excelente) y también alguna sabrosa observación sobre como ellos (los protagonistas masculinos) se relacionan con las drogas y las mujeres, en ese orden.
El clima es explosivo, atronan las risas neuróticas, los actores improvisan muecas y eligen formas divertidas para morir… No, no hay que explicarla más. Deben verla. Importante, si les gustan las comedias ordenadas, pulcras, simpáticas, esta no es la suya. Aquí hay una multiplicidad de eventos en tono siempre delirante, que no da tregua ni permite mucha profundidad en el análisis. Querían hacernos pasar un buen momento y lo logran.
Este año me reí poco en sala, pero creo que las mayores carcajadas, me la sacó este 2014, “This is the end”. Bienvenidos a la fiesta.