En tus zapatos

Crítica de Ezequiel Boetti - Página 12

Fábula zapatera que no llega a ninguna parte

 En tus zapatos es la primera película en la que Adam Sandler no hace enteramente de Adam Sandler desde La esperanza vive en mí (2006). Es decir, en la que este hijo dilecto de la cantera de Saturday Night Live no escupe chistes de dudosa eficacia en todas y cada una de sus escenas, ni tampoco interpreta a un adulto que nunca quiso serlo, ni reniega constantemente de su condición y las responsabilidades acarreadas por el paso del tiempo. Al contrario, luce extrañamente melancólico, tímido, reservado y mesurado en su comicidad, ajustándose a un guión que se esfuerza por encorsetar sus diatribas desaforadas, sus explosiones emocionales, su pulsión por el grito y el desubique. El actor con cara de huevo es aquí Max, cuarta generación de una tradicional familia de zapateros neoyorquinos que, al igual que el personaje de Paul Giamatti en Win Win, trabajo anterior como director de Thomas McCarthy (The Station Agent, The Visitor), divide su rutina entre la soledad, sus deberes diarios y una vida emocional escasa, limitada al cuidado de su madre enferma y a algo parecido a una amistad con el peluquero de la cuadra (Steve Buscemi).El combo se completa con las consecuencias de un trauma no resuelto con su padre abandónico (Dustin Hoffman) y un par de apuntes sociales y económicos vinculados a los negociados inmobiliarios en el barrio neoyorquino, mapeando así una potencial ruta pedregosa centrada en los avatares dramáticos del protagonista. Ruta que inicialmente el film opta por evitar. Esto porque el guión, coescrito por el propio McCarthy y Paul Sado, desviará hacia la fantasía cuando Max descubra que puede cambiar su apariencia por la de los clientes con tan solo calzarse sus zapatos, siempre y cuando hayan sido reparados con una máquina centenaria. Ante esto, lo primero que hará él es someter el hechizo a la satisfacción de sus caprichos y a una serie de picardías infantiloides (irse sin pagar, manejar autos ajenos, flirtear con chicas), dándole a este período del film un humor zumbón y medio pavote cercano al “sandleriano”.Los problemas comienzan sobre la mitad del metraje, cuando En tus zapatos parezca recordar aquello de “ponerse en la piel de otro” que se dice en un prólogo situado a comienzos del siglo pasado, poniendo en el centro de la escena un concepto de responsabilidad hasta ese momento ausente. Tal como ocurría en Click: perdiendo el control, una de las peores películas de Sandler, el film de McCarthy deja de lado la comedia más pura para empujar a su protagonista a una sucesión de actos atravesados por la idea de aplicar su descubrimiento para el bien común (el develamiento masivo de una tramoya económica/criminal), la redención familiar (¡ay!, esa escena con la madre) y el saldado de cuentas ajenas antes que para el divertimiento personal. Sobre el final llegarán las explicaciones y enseñanzas para Sandler, a quien, queda claro, la maduración forzada e impuesta no le sienta para nada bien.

5-EN TUS ZAPATOS

(The Cobbler/Estados Unidos, 2014)Dirección: Thomas McCarthyGuión: Thomas McCarthy y Paul Sado.Duración: 98 minutos.Intérpretes: Adam Sandler, Ellen Barkin, Steve Buscemi, Dustin Hoffman y Cliff Smith.