En el futuro

Crítica de Daniel Cholakian - Fancinema

El fantasma del futuro

Besos. Besos profundos, besos sonrientes, besos barbudos, besos calientes. Besos que se besan, bocas que se encuentran. Besos en primer plano. Besos de parejas, parejas que se besan. Se besan con ganas, con gusto, con gestos. Besos con manos que acarician. Besos que miran. Besos.

Besos.

Así comienza En el futuro, la pequeña, bella e interesante película de Mauro Andrizzi. Una larga secuencia de besos que, al tiempo que incomodan al espectador, abren el mundo de una intimidad tan profunda que sólo ese gesto pleno y poseyente convoca. Lo que sigue, guiado por el fantasma de lo que fue o será -un fantasma ambiguo- es una serie de pequeños relatos sobre el amor. Pequeños cuentos en primera persona sobre los amores reales, misteriosos, fallidos, silencios, dolidos o gozosos. Actores que relatan historias, que las cantan, que las actúan, que abren lugar a la imaginación y el recuerdo para que cada espectador complete historias y, tal vez, recorra el camino de su propia memoria.

Trabajada en un misterioso blanco y negro, que ayuda a desdibujar las referencias de espacio y tiempo, cada historia es diferente aun cuando todas hablan del amor íntimo, profundo. El amor es En el futuro un espacio de misterio. Este es el hilo de Ariadna que nos permite recorrer la película de Andrizzi, el misterio. No como la insondable razón de la existencia del amor, sino como el devenir misterioso del amor concreto en la vida de las personas.

El realizador maneja con mucho tino el recurso del plano secuencia sobre el que construye la película. Dosifica los relatos realizados frente a una cámara fija, con otros donde la cámara adquiere movimiento o con un logrado montaje de fotos. Cada historia tiene su propia lógica y sus propios protagonistas y esa diversidad, más la ausencia de todo juicio, son claves para que el relato de voces múltiples pueda reconstruirse como uno solo.

En el futuro convoca a mirones, cinéfilos y amas de casa desesperadas. Aunque la presenten como una apuesta de vanguardia, es una apuesta de futuro. Y allí, En el futuro, todos podemos encontrarnos.