El reencuentro (USA)

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

En este film Richard Linklater vuelve a la preocupación que marca sus films, el paso del tiempo y lo que ese tiempo hace con los protagonistas. Como en su saga que comienza en “Antes del amanecer” o en “Boyhood” filmada durante años. En este caso recurre a una novela de de Darril Poniscan, que retoma a los personajes de su anterior trabajo, “The last retail” que dio pie a una famosa película de Hal Ashby que marcó toda una época: “El ultimo deber”. Pero este film no funciona como una secuela, el director y el autor se encargaron del guión y de realizar los cambios. Aunque en esencia, es como la otra, una road movie amarga, donde se reflexiona sobre Vietnam, Irak, el atentado a las torres, las guerras en las que cíclicamente se embarca EEUU. Entre ese hombre apagado, que rara vez se suelta, el barman socarrón y que parece estar de vuelta de todo y el actual pastor evangelista parece no haber nada en común. Pero tuvieron un pasado en Vietnam, donde el alcohol y las prostitutas eran la única vía de escape del infierno. Pero además, y ese secreto se develará poco a poco, un hecho sobre el que solo uno de ellos pagó con la cárcel. Treinta y cinco años después, el que se apoda “Doc” llega para pedirles el gran favor de su vida. Que lo acompañen a recibir el cadáver de su hijo, muerto en Irak para luego enterrarlo. Y en ese viaje, de a poco, retoman esa camaradería que alguna vez lo unió y que les resulta inolvidable, igual que su manera critica de ver las guerras, la institución militar y sus mentiras, un sentimiento patriótico que es común descubrir es el pueblo estadounidense, un tanto lejano y difícil de comprender, y por sobre todo una amargura y una lucidez que resplandece al cabo de tantos años. Con un trío de actores que es un placer de ver, Steve Carrell en una construcción dramática inolvidable, Bryan Cranston y Laurence Fishburne. Por ellos tres ya vale la película. Además de la mano de Linklater que los lleva a las zonas oscuras, las contradicciones, los climas inapelables, a verdades demasiado tiempo ocultas. Quizás no sea su mejor película, pero vale.