El pacto

Crítica de Lucas Rodriguez - Cinescondite

Para crear una buena historia sobrenatural no hace falta ir muy lejos. Todos los elementos ya están trabajados y, mientras que algunas películas suelen forzar dichos elementos y no producir ninguna inquietud en el espectador más allá de unos cuantos sustos manufacturados, lo que destaca a El Pacto por sobre otras compañera de rubro es un buen guión y una sólida dirección.

Trabajando en base a su propio corto, Nicholas McCarthy entrega en su primer largometraje un cuento fantasmagórico mechado con un soberbio thriller, que sobresale por la creación de un ambiente sofocante y malintencionado. A través de los ojos de la protagonista, una tragedia familiar acerca a las hermanas Barlow, separadas hace muchos años. No hará falta mucho para que las cosas empiecen a andar mal, y Annie deberá volver a la casa donde pasó su infancia para resolver la desaparición de su hermana. Ah, y también descifrar los terribles sueños -más bien pesadillas- que la aquejan desde que puso un pie en su antiguo hogar. Buena parte del metraje es una seguidilla de pistas y momentos escalofriantes para revelar el misterio que encierra el film, con personajes tan sensatos -el detective que encarna Casper Van Dien- como escabrosos -esa medium adolescente ciega-, pero toda la construcción tiene su resultado final, un desenlace trepidante que toma al espectador por sorpresa y lo termina de empujar a un estado de histeria intenso.

No voy a mentir, El Pacto tiene su buena cuota de sustos, no todo es una meseta de asfixiante ambiente, pero esos momentos están demasiado bien logrados, y llegan en el punto justo del film para insuflarle un poco más de ritmo a un marco narrativo lento, pero no aburrido. McCarthy sabe jugar con los elementos a disposición y poco a poco va creando su caso mientras seguimos a la heroína, una agradable Caity Lotz -que algunos reconocerán ahora como una secundaria en la serie Arrow-.

Para cuando llega el final, muchas respuestas no han sido contestadas. ¿Qué es el pacto al que se refiere el título? No lo sabemos fehacientemente, pero McCarthy ha dejado sembradas las semillas para contestar dicha pregunta a lo largo del film. Es un movimiento cuestionable, junto con la última imagen que nos deja la historia, pero una movida inteligente al fin y al cabo, que fuerza al espectador a volver en sus pasos y encontrar dichas respuestas. Una de fantasmas que asuste y que además te obligue a pensar, no es algo que abunde en la cartelera local, por eso es que El Pacto llega en un momento preciso, y eso es algo para festejar -y dormir con un ojo abierto además-.