El discurso del rey

Crítica de Claudio Lo Iacona - Todo lo ve

Un film sin tartamudez

Nominada a 12 premios de la Academia, la película de Tom Hooper sorprende por su pequeña pero a la vez intensa historia que profundiza en un vínculo establecido en el seno del poder de Inglaterra.

Después de la muerte de su padre, el rey Jorge V (Michael Gambon) y la escandalosa abdicación de su hermano, el rey Eduardo VIII (Guy Pearce), Bertie (Colin Firth) se ve súbitamente coronado como Jorge VI de Inglaterra. Su esposa Elizabeth (una magistral Helena Bonham Carter) le arregla un encuentro con un excéntrico terapeuta del lenguaje, Lionel Logue (Geoffrey Rush), un actor australiano frustrado que utiliza técnicas muy poco convencionales. Después de un tratamiento poco ortodoxo, ambos llegarán a desarrollar un vínculo indestructible.

Con el apoyo de su familia, del gobierno y de Winston Churchill (Timothy Spall), el rey superará su tartamudez y pronunciará un discurso radial memorable que inspirará a su pueblo para mantenerse unido ante la batalla. Basada en la verdadera historia del Rey Jorge VI, El discurso del rey se centra en las búsquedas de un monarca que encontró su propia voz.

Tom Hooper cuenta una historia que no tiene desperdicio, con un guión sumamente atractivo y una puesta en escena más que correcta, para ir narrando esta legítima leyenda. Luego de su paso por Un Hombre Solo (A single Man), Colin Firth esta preparado para oscarizarse con una interpretación memorable. Su transformación irá pasando por el habla, la postura, la mirada y la seguridad personal.