Chloe

Crítica de Hugo Zapata - Cines Argentinos

Chloe ofrece un ameno reencuentro en el cine con ese buen director que es Atom Egoyan, que hacía rato que no teníamos novedades de él en las salas argentinas.
Su último trabajo que pasó por los cines locales había sido Ararat, en el 2002, una muy buena historia sobre el genocidio armenio.
Los tres trabajos que hizo luego de esa producción no consiguieron distribución en nuestro país.
Esta nueva película de Egoyan entra en la categoría de lo que muchos críticos suelen etiquetar como “thriller erótico” que es un término que nunca me terminó de cerrar del todo.
La verdad que se tendrían que haber dado muy mal las cosas para que un film que reúne a Liam Nesson, Julianne Moore, Amanda Seyfried y Egoyan resultara decepcionante.
Chloe es la clase de película que se disfruta por la interpretación que entregan los actores y en este caso la narración del director.
La historia no es un cuento de Hitchcock precisamente pero esta bien contada y engancha hasta su conclusión.
Amanda Seyfried, quien este historia está más atractiva que nunca, se luce por componer un personaje que en otra actriz (digamos Jessica Alba) hubiera resultado un culto al cliché.
La enigmática prostituta que interpreta está muy bien cuidada y nunca cae en lugares comunes.
Es muy loco ver que se trata de la misma actriz que hace poco vimos en Cartas para Julieta en un rol totalmente diferente. Pero bueno, eso es lo que generan los grandes actores de verdad y Amanda claramente es una de las mejores de su generación.
Es importante destacar que Chloe es una remake de Nathalie, la película de Anne Fontaine, protagonizada por una inolvidable Emmanuelle Beart que acá se estrenó en el 2004.
La diferencia con el film original es que en la versión de Egoyan la tensión sexual entre los personajes principales está mucho más marcada y el final se podría decir que lo hicieron más hollyoodense.
De todas formas es una buena película, que no está a la altura de otros laburos superiores de Egoyan como Ararat, El dulce porvenir o Exótica, pero los que no hayan visto Nathalie se pueden enganchar.