Chappie

Crítica de Jorge Marchisio - Alta Peli

Mientras robots humanoides son usados como complementos para la policía, su programador dará un paso más allá en la creación de inteligencia artificial con el primer bot autoconsciente.

Yo, Chappie

En un futuro cercano, en Johannesburgo, se empiezan a implementar los robots fabricados por una multinacional para ayudar a la policía a contener a los pandilleros. Todo parece funcionar bien, y Dean, el padre de estos androides, acaba de crear una inteligencia artificial que no solo es autoconsciente, si no que también puede aprender y evolucionar. Pero la humanidad aun no esta preparada para estas cosas.

Tu trama me suena

Neil Blomkamp tuvo un debut perfecto con la también perfecta Sector 9, y la mayoría (me incluyo) pensó que este director era uno para seguir de cerca su carrera, y que estaba llamado a ser partícipe del grupo que dará el cambio generacional como realizadores de películas de ciencia ficción. Pero su siguiente película, Elysium, nos demostró que si bien el sudafricano tiene talento y algo que ofrecer, también nos hizo ser mas parcos con los elogios.

Si sos de los que sospecha que Blomkamp hizo por tercera vez la misma película, la respuesta es sí y no. Chappie vuelve a mostrar los temas que más le interesan a su director, como mostrar de forma clara la desigualdad social y la opresión de las clases más bajas por parte de multinacionales megalómanas.

Pero Chappie es bastante más que eso, porque también se nos plantea una vez más el mito de Prometeo (historias donde el hombre crea otra forma de vida) intentando darle una vuelta de tuerca al asunto, todo acompañado con los espectaculares tiroteos que suele mostrarnos Blomkamp (esta vez sin recurrir a la cámara con parkinson como en Elysium). Por suerte tanto Blomkamp y su co-guionista supieron dotar al robot de la película con la suficiente personalidad como para cargarse la trama a sus espaldas él solo, y haciendo que el espectador le tome bastante cariño cuando el cacharro con conciencia se las vea complicadas. Muchas veces cuando esto sucede, los personajes secundarios suelen ser bastante arquetípicos y funcionales, siendo apocados por el principal; y si bien no son una oda a la originalidad y hasta rozan lo previsible, todo parece funcionar bien, sin molestar demasiado al espectador.

Esto se da en gran medida gracias al buen trabajo del plantel actoral. Desde Sharlto Copley haciendo un enorme trabajo vocal para darle voz a Chappie, hasta la sorpresa de la película que son los desconocidos por estos lares Ninja y Yolandi como los mami y papi del robot principal; mientras que el eterno remador de Jackman y Dev Patel cumplen como el humano envidioso y el creador comprometido con su obra, respectivamente.

Conclusión

Chappie es una buena película, bastante superior a la anterior obra de su director, pero también es muestra de que debe darle un cambio de rumbo a sus historias para no terminar cansando a los espectadores. Está bien filmada, entretiene, pero es inevitable no recordar a RoboCop constantemente (despidan al que diseñó al robot Alce), pero la buena mano de todos los involucrados hace que aun así la película sea disfrutable.