Brightburn: hijo de la oscuridad

Crítica de Jorge Bernárdez - Subjetiva

“Brightburn: hijo de la oscuridad”, de David Yarovesky
Por Jorge Bernárdez

Un matrimonio de granjeros busca tener hijos pero no lo consigue, eso es lo primero que nos enteramos de Brightburn, en la primera imagen de la película que es un paseo por la casa del matrimonio en el que se ve una biblioteca en la que un par de estantes están ocupados por libros sobre el tema de la fertilidad. En la noche cae en el terreno de la casa un objeto desde cielo y en él llega un niño que la pareja asume que es un verdadero milagro y adopta sin contarle nada a nadie. Ya en esos primeros minutos de película uno advierte que está en buenas manos y que el director David Yarovesky es alguien a quien hay que prestarle atención. Lo segundo que el espectador advierte es que esta historia la hemos visto más de una vez y es cierto, como que es la historia de Superman. La diferencia entre aquella y Brightburn es que mientras que el extraterrestre de Krypton vino a la Tierra para protegernos el pequeño Brandon, que así bautizan al niño caído del cielo, es más bien retorcido y mete miedo.

La historia salta rápidamente en el tiempo y se instala en el cumpleaños número 12 de Brandon. Hasta aquí el niño ha sido un prodigio. Buen alumno, amable, sano y todo lo que los padres pueden desear, pero al entrar a la adolescencia el muchacho muestra patrones de conducta preocupantes, como volverse insolente con los padres o reaccionar ante el ataque de sus compañeritos de colegio que lo ven como un freak. Brandon se vuelve cada vez más intratable, alguien dirá que así son los adolescentes en general, pero Brandon es raro en serio.

El relato que arranca robando planos incluso de El hombre de Acero de Snyder, se convierte en una de terror donde uno adivina que los responsables son fanáticos de La profecía de Richard Donner. Del clima de suspenso se pasa a un verdadero desenfreno propio del teror gore y a un final inquietante.

Si todo el elenco cumple a la perfección con lo que necesita la película, vale la pena resaltar a Elizabeth Banks que se pone en la piel de la madre de Brandon, que primero sufre por los cambios del niño, después trata de protegerlo de una cantidad de pruebas que se van amontonando y señalan a Brandon como sospechoso, para finalmente asumir que el hijo es un monstruo.

James Gunn, responsable de las películas de Los guardianes de la galaxia es el productor y los autores del guión son los primos. Todo queda en familia y habrá que ver si este nuevo generó que parece anunciar Brigthburn tendrá fuerza pero por lo pronto hay que decir que es una gran sorpresa y que es muy bueno que un producto de estas características pueda abrirse paso en la cartelera para recuperar lo mejor del espíritu del cine de Clase B y dejar una par de escenas de muerte para la antología de la historia del cine.

BRIGHTBURN: HIJO DE LA OSCURIDAD
Brightburn. Estados Unidos, 2019.
Dirección: David Yarovesky. Guión: Brian Gunn y Mark Gunn. Elenco: Jackson A. Dunn, Elizabeth Banks, David Denman, Matt Jones, Meredith Hagner, Steve Agee, Becky Wahlstrom, Stephen Blackehart, Gregory Alan Williams, Jennifer Holland. Producción: James Gunn y Kenneth Huang. Distribuidora: UIP. Duración: 90 minutos.