Black Adam

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

Mas que la película de un supe personaje aquí se trata de un antihéroe prácticamente invencible, que está muy, muy enojado. Esta superproducción tiene varios problemas. Primero se abusa del rol de un relator para que explique la historia, bastante intrincada. Pero luego, también hay que resolver que el pasado no era como parecía. Para los que no son especialmente fans del mundo DC, estas demoras en querer dejar todo en claro afectan la fluidez del film, aunque el director Jaume Collet-Serra se esfuerza en poner acción grandiosa, imponente y con pretendida solemnidad. Llama la atención la falta de humor. Tener a alguien tan carismático como Dwayne Johnson, tan gracioso en la comedia, para hacer de musculoso pocas pulgas eternamente emperrado es mucho, se extraña que no afloje un poco. A favor hay que decir que este Black Adam se ve majestuoso, magnético aunque volátil y antisocial. La acción transcurre en un país parecido a Egipto donde se supone hay una primavera árabe contra una corporación extranjera que esclaviza al pueblo. La resistencia busca la corona de un metal especial que da poderes y los malos desean lo mismo. Cuando llega un comité de La Sociedad de justicia de América con Hawkman y Dr Fate, los oprimidos les reprochan porque no se jugaron antes por ellos. Rarísimos giros para buscar nuevos públicos o una acción geopolítica, vaya uno a saber. Los combates y los efectos especiales están bien, son espectaculares, y se supone que este anti-héroe se pondrá mejor en su próxima película. Por eso no se vaya cuando empiezan los títulos que la sorpresa para el futuro es sabrosa.