Bienvenido a Alemania

Crítica de Javier Porta Fouz - La Nación

Bienvenido a Alemania: ramplón canto a la diversidad

La película alemana más vista en 2016 es una comedia familiar centrada en la familia Hartmann, cuya cotidianidad cambia radicalmente cuando la señora de la casa decide dar asilo a un nigeriano. Tensiones, modificaciones, problemas y soluciones, en grandes cantidades y con escasísima profundidad. No sólo por la idea de abarcar mucho, sino porque Bienvenido a Alemania se decide por un estilo ramplón, de fórmula probada una y mil veces en el cine del mínimo denominador común, ese que no sabe de formas genéricas populares y las confunde con modos de teleserie que se fabrica a alta velocidad y no tiene tiempo de reflexionar.