Bad Cat

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

El protagonista es un gato matón, malhumorado, políticamente incorrecto, enloquecido por las gatitas, y absolutamente dictatorial. Es sin dudas una animación para adultos, aunque en su traslado al cine, hubo limpieza de escenas de sexo y de violencias sangrientas. Los directores Mehmet Kurtulus y Ayse Unal se basaron en un comic under de enorme éxito en Turquía, que se comenzó a publicar desde l997 con mucho humor negro y mensajes políticos. Ambientado en uno de los peores barrios de Estambul. El autor se inspiró en otro comic famoso “Fritz, el gato” de Robert Crump Pero también en su propio gato y en una especie de alter ego de Garfield, sarcástico, enojoso, amigo del bullying que maltrata a sus colaboradores, una gaviota y una rata que le temen y lo sirven. A ese gato le aparece un hijo no reconocido, se enamora, las cosas le salen bien y mal y por sobre todas las cosas es entretenido.