A vuelo de pajarito

Crítica de Paraná Sendrós - Ámbito Financiero

Retrato de un periodista poco común

Ese hombre de bastón, ya octogenario, que va detrás de su esposa con el perro, es todavía, como lo definió "Primera Plana" en 1964, "un peligro que camina o que escribe, porque además es periodista. Basta que se lea su firma, Rogelio García Lupo, para que el artículo adquiera un interés poco común, el de la cosa inédita, el interés de lo prohibido, de lo que se pronuncia en voz baja..."

Ahora el hombre relata diversas anécdotas de su vida, en una biografía hecha a vuelo de pájaro, o de Pajarito, porque así le dicen, y así lo pintan las fotos y caricaturas animadas que intercalan cada capítulo. Su hijo Pablo hizo los dibujos, y Santiago el documental, que agrega anécdotas y pareceres en boca de viejos amigos, de su esposa Gabriela Courreges, y del propio realizador. Algunos hacen la debida valoración profesional, otros alguna broma, y el muchacho la mirada de entrecasa que contribuye al tono amable del relato. Como es un vuelo de pájaro, no vemos los comienzos en 1952, el libro de 1968 "Contra la ocupación extranjera", con su lista de militares en actividad vinculados a empresas norteamericanas, y otras cuantas perlas, pero, en cambio, surge un lindo retrato del viejo periodista y sus colegas, que es también el retrato de un grupo de argentinos de otra época.

Así pasan el Zeppelin sobre Buenos Aires, el tío Miguel, entrenador de la nadadora argentina Jeanette Campbell en Berlín 1936, la incorporación a la Alianza Libertadora Nacionalista ("el nacionalismo fue lo que me atrajo del peronismo, el nasserismo y la Revolución Cubana"), el puesto de auxiliar noveno de un juzgado en lo criminal (apenas mencionado), los estudios de Derecho, la habilidad como redactor publicitario y jefe de empresa constructora, el gangsterismo post-peronista, el caso Satanowsky (y el carnet de la Side de un imputado, que RGL consiguió para la tapa de un libro), la experiencia de Prensa Latina en Cuba, hasta que el Partido Comunista desplazó a los fundadores, el plomazo de Allen Ginsberg, el trabajo gratuito en la CGT de los Argentinos, la dirección ejecutiva de Eudeba, donde logró éxitos de venta pero no pudo sacar las obras completas de Lugones, y los años de abstinencia obligada cuando "el único nexo con el periodismo era taparse la cara con un diario para dormir la siesta", hasta que la confidencia de un marino le permitió enviar un rápido mensaje a dos posibles empleadores: "Parece que estos tipos van a invadir las Malvinas y supongo que ustedes van a necesitar un corresponsal, ya".

Se incluye hasta su reciente investigación sobre la mafia china a partir de unos curiosos avisos clasificados. Varias de sus investigaciones nacieron de la paciente lectura de clasificados, avisos fúnebres, el Boletin Oficial, etcétera. Y de su enorme capacidad de asociación y deducción, por supuesto. Gran parte de su archivo y su biblioteca hoy están en la Biblioteca Nacional, junto a los archivos de César Tiempo, Arturo Frondizi, Eduardo Cúneo y otros pocos intelectuales que enriquecieron los fondos públicos. El documental muestra cómo fue la donación, y toma nota de algunas cajas con material para investigaciones: Logia P-2, Secta Moon, Al Kassar, Menem (dos cajas). En algún momento estarán a disposición para consulta pública.