La ballena va llena

Crítica de Leonardo M. D’Espósito - Revista Noticias

Un documental sobre cómo no sucedió algo, una idea disparatada para aniquilar la pobreza y salvar el arte, utópico proyecto absurdo de cinco artistas en estado de comediantes geniales, que en realidad -como todas las bromas- va en serio. El film desnuda además las miserias burocráticas del negocio que rodea a la creación y, por qué no, los discursos falsos de muchos artistas con ínfulas. ¿Ficción o realidad? Ahí están Daniel Santoro, el Tata Cedrón, Juan Capurro, Pedro Roth y Marcelo Céspedes discutiendo la posibilidad de “la Ballena”: una embarcación que se llenaría con miles de pobres a quienes luego habrían de transformar en obras de arte para renovar los museos (y sí, tiene algo de la “modesta proposición” de Johnathan Swift, por qué no). Hay diseños, hay discusiones, y hay también búsqueda de apoyos oficiosos u oficiales para hacer realidad la utopía estética del grupo Estrella del Oriente, estos buenos muchachos. Una película que demuestra que el espectáculo es lupa de la realidad y no velo que la oculta.