Zootopia

Crítica de Walter Pulero - Cinergia

Un mundo ideal

Hace un buen tiempo que las películas animadas con protagonistas animales tienen poco para decir. Va para el caso las continuaciones de La era de hielo, Madagascar y sus Pingüinos, Un gallo con mucho huevo, por poner algunos ejemplos. Pero Zootopia de Disney logró desprenderse de esa falta de originalidad y demostrarnos que aún queda algo por contar.
Con una imagen muy a lo Pixar (John Lasseter, uno de los fundadores de Pixar, se encuentra a cargo de las producciones animadas de Disney), Zootopia cuenta con un guion sólido y con una elaborada trama, donde los momentos de comedia son supremos. Hay variedad de animales (algunos adorables y otros más aterradores), que entretienen a los niños mientras los más adultos intentan descubrir las referencias a la cultura pop entre medio de tanto delirio y un discurso incisivo acerca de la gestión social y política.
No solo se trata de excelencia técnica (la precisión con que se imita el movimiento real de cada animalito es excelente y a cada especie se le otorgó una razón para estar y un hábitat propio.) y artística: como toda película animada, no está exenta su moraleja, con un claro mensaje de inclusión, perseverancia y lucha, y el tono elegido es el indicado, sobre todo por su forma de narrar la historia.

Tierna como un conejo y astuta como un zorro, esta película logró un resultado muy bueno, donde combina el policial y la comedia sin recurrir a golpes bajos. Disney hizo de nuevo un film para toda la familia, un reto para la llegada de las nuevas películas con animales de la temporada: La vida secreta de tus mascotas y Sing.