Vivir de noche

Crítica de Jessica Johanna - El Espectador Avezado

Joe Coughlin nunca quiso ser un gángster. Tampoco convertirse en un asesino. No le gusta la violencia. Pero la vida parece haberlo llevado a ese lugar cuando le es arrebatada la mujer de la cual se enamoró. Y de a poco, Joe Coughlin va inmiscuyéndose en un mundo que no le agrada pero en el cual logra desenvolverse, y convirtiéndose en alguien que no termina de gustarle. Somos el resultado de las decisiones que tomamos, y Coughlin no va a ser la excepción. Cuando se está dentro de ese mundo, ¿hay posibilidad de un final feliz?
La nueva película de y con Ben Affleck, adaptada de una novela literaria de Dennis Lehane (a quien Affleck ya adaptó en su primera y mejor película, Gone baby gone), pone en foco al mundo gángster desde la perspectiva de un soldado de la Primera Guerra Mundial que tras robar bancos y enamorarse de la mujer (Sienna Miller) del mafioso local más poderoso, termina convirtiéndose en aquello que odia para poder vengarse.
A medida que Coughlin se torna más poderoso, su mundo se torna más violento y sanguinario. Pero también logra volver a enamorarse y con aquella mujer (Zoe Saldana) se encuentra una vez más frente a aquello que quiere ser vs. aquello en lo que se está convirtiendo.
Adaptada por el propio Affleck, el guión bucea entre diferentes temas y tonos, la religión, el amor, la moral, la venganza, la amistad, la ambición y en algún momento se pierde entre tanto que quiere abarcar. Algo parecido sucede en los últimos veinte minutos, con un último tramo recargado de falsos finales.
Affleck sabe de cine y acá como director es donde mejor se desenvuelve, entregando algunas secuencias realmente buenas, especialmente aquellas de acción, ya sean las de persecuciones como las de los tiroteos.
Hay en general también un muy buen trabajo con los diálogos, siendo los de las escenas románticas los que menos se lucen, mientras que junto a Messina y a Elle Fanning (del reparto femenino, es la que mejor logra destacarse), por separado, se consiguen momentos inolvidables.
Resumiendo, Vivir de noche es una película que en cierto grado le queda grande a Ben Affleck. Así como el actor ya pudo demostrar una sólida faceta como realizador con una filmografía no muy extensa, en Vivir de noche nos entrega una buena película que sin dudas podría haber aspirado a más. Quizás en su afán de querer abarcarla desde cada costado (como director, como guionista y como protagonista) perdió un poco el eje. De todos modos, no deja de ser un film rico e interesante.