Victoria

Crítica de Samantha Schuster - Toma 5

Dentro de la competencia “Vanguardia y Género” del BAFICI tenemos a una película que supimos que hizo mucho ruido en la Berlinale. “Victoria” cuenta la historia de una chica madrileña de dicho nombre, que a la salida de un boliche conoce a un grupo de chicos que harán que su estadía en Berlín cambie para siempre.

Ya desde el comienzo, y sobre todo a partir del encuentro con los alemanes, uno ya sospecha que las cosas no le resultarán bien para Victoria. Y efectivamente el momento de fiesta se va a ver teñido por una deuda del pasado de uno de los chicos del grupo. Aunque al principio la historia parezca ir por un rumbo (con un ritmo más lento y toques de comedia romántica), termina dando un giro hacia el suspenso y la acción.

“Victoria” nos mantiene tensos y al borde del asiento en todo momento. Al principio porque creemos que en cualquier momento pasa algo, y después, porque no dejan de pasar cosas, atrapándonos completamente.

Una de las particularidades de la película es que está filmada con un solo plano secuencia, algo original que hace poco pudimos ver también en el film ganador del Oscar, “Birdman”. Y está realizado con mucha perfección; se nota el trabajo detrás, ya que filmar 140 minutos de una vez (aunque se realizaron tres tomas distintas para terminar eligiendo una) y que salga bien es algo complejo. Esto permite además que el relato se vuelva muy dinámico, intenso y frenético y que nos veamos involucrados también desde la fotografía.

Con respecto a las actuaciones, todo el elenco se encuentra muy correcto. Cada personaje tiene un estilo distinto, con un momento en el cual se destaca. Pero sin duda los protagonistas son los que más resaltan en el film. A Frederick Lau, quien interpreta a Sonne, el líder de la banda, lo pudimos ver en otra película alemana “La Ola”, donde realiza un impecable labor y en este film se encuentra nuevamente a la altura; mientras que Laia Costa, quien encarna a Victoria, compone un gran personaje, donde el hecho de conocer a alguien luego de tres meses de soledad en un país extranjero puede más que cualquier acto ilegal a punto de cometer. Laia muestra una fortaleza en Victoria, que frente a los peores momentos es la persona del grupo que se mantiene más entera y racional, pero que también presenta una gran vulnerabilidad y frustración.

El cine alemán va desembarcando de a poco en nuestro país y son estas joyas que nos ofrecen una historia fuerte, intensa y atrapante, bien construida, filmada con excelencia, con grandes actuaciones y que no podes sacarle los ojos de encima, las que valen la pena mirar.

Samantha Schuster