Tótem Lobo

Crítica de Santiago Balestra - Alta Peli

Un espectáculo visual incuestionable pero narrativamente denso.

El vínculo del hombre con los animales es uno que ha sido narrado y documentado con amplio detalle. Algunos con objetividad, muchos más con toda emoción. Jean Jacques Annaud, responsable de El Oso, desembarca en el IMAX Argentina por una semana con Tótem Lobo que retrata uno de estos vínculos.

¿Lobo esta?

En plena revolución cultural china, Chen Zhen, un joven estudiante de Beijing es enviado con pastores Mongoles para instruirlos. Una vez allí es advertido de los peligros de los lobos que matan a su ganado y a todo ser vivo que se mueva. Zhen se propone encontrar a uno de los lobos y criarlo como propio. Al mismo tiempo que se produce un lazo entre ambos, las complicaciones empiezan a presentarse; no solo por parte de los lobos, sino de los pastores y el gobierno para el que trabaja.

Tótem Lobo 2El guion de Tótem Lobo es uno demasiado extenso para su bien. Aunque Annaud y sus guionistas desarrollan de un modo bastante decente el vinculo entre el estudiante y el cachorro, durante la primera mitad de la película esta se pierde entre escenas con humanos que aunque poseen conflicto, no otorgan mucha progresión; casi al punto que se sienten como escenas de relleno. Recién a la mitad de la película, el guion vuelve a concentrarse más específicamente en el vínculo principal, camino a un desenlace satisfactorio.

No obstante, me veo en la obligación de decir que la película como un todo se siente lenta. Dura dos horas y se siente de cuatro.

Por el costado visual, Tótem Lobo posee una fotografía riquísima. Aunque el 3D no está bien aprovechado, debe decirse que el gran formato del IMAX le sienta perfectamente a las cuidadosas composiciones de cuadro y el uso del color que Annaud le da a todos y cada uno de los planos. Dentro de esto, también debe destacarse que le sabe sacar planos impecables a los lobos, al punto que consigue otorgarles expresividad. Una tarea nada fácil.

Conclusión
A pesar de poseer un impecable despliegue visual, Tótem Lobo tiene un ritmo demasiado denso para su bien, por no decir una narración que tiene muchos rellenos superficialmente desarrollados. Una lástima, porque el vínculo principal estaba bien trabajado; lo épico no hacía falta, pero el director sabrá porque lo hizo.