Tan cerca como pueda

Crítica de Rolando Gallego - Lúdico y memorioso

Microscopio de Pueblo

Hay un instante en "Tan Cerca Como Pueda"(Argentina, 2014), de Eduardo Crespo, que es hipnotizante. Daniel (Daniel Laferrara) ingresa a un almacén al que le abren de "favor" y se pierde, primero en los escaparates, que le ofrecen miles de productos, algunos de ellos quedados en el tiempo, y luego en los dibujos que Eleonora (la hija del dueño del local) realiza sobre cada uno de los habitantes del lugar.

En esa minuciosidad con la que la joven dibuja los rostros de sus vecinos hay una impronta del detalle y que aludiendo al título del largo Crespo quiere mostrarnos.

Si bien en "Tan Cerca..." no vamos a encontrar un conflicto que dispare las acciones (como sí por ejemplo lo tuvo Celina Murga en la reciente "La tercera Orilla", otra excelente muestra de lo que acontece por el norte argentino), la sola contemplación de la rutina de Daniel y de su sobrino Giovanni (Giovanni Pelizari), gente de pueblo, capaz de ejercer la misma profesión (construir casas) uno con su mente y el otro con sus manos, sirve para comprender el entramado de anhelos y esperanzas de los expectantes habitantes del interior profundo del país, en donde un bautismo se transforma en un acontecimiento único y la noche del sábado se puede pasar o bien bailando en una disco o tomando alcohol dentro de un cementerio.

En la mirada cansina de Daniel, y en el agotamiento físico de Giovanni, Crespo, acompañado de la bellísima maestría de Iván Fund en la fotografía, nos habla de sueños y deseos postergados, de dos personas que a pesar de estar uno pegando la vuelta y el otro recién caminando, todavía quieren decir yo estoy vivo y quiero que lo notes.

La cámara que nunca se detiene, siempre acompaña a los protagonistas y sus lugares. Así, un paneo por la habitación de Giovanni es un manifiesto sobre el paso del tiempo.

El vivir al día, el pedir prestado, el cansancio "reparado" con una partida de truco entre cervezas y cigarrillos, la imposibilidad de mantener vínculos estables, la digresión como estatuto y el virtuosismo del director para destacar objetos (todos ahora queremos un hombre araña deslizante) hacen de "Tan cerca como pueda" una propuesta interesante.

PUNTAJE: 6/10