Sin escape

Crítica de Agustín Neifert - La Nueva Provincia

Radiografía de un ladrón y maratonista

El ladrón es el título original de este filme, más explícito y real que el impuesto en nuestro país. El guión está basado en una novela de Martin Prinz, quien a su vez se inspiró en el maratonista y ladrón austríaco Johann Kastenberger, famoso en la década de 1980.
También era conocido por su apodo de "Pumpgun Ronnie", por su fusil y la careta de Ronald Reagan que lucía en sus atracos a los bancos, que fue su "especialidad". En la película se denomina Johann Rettenberger. Sus escasos amigos también lo conocían como Hans.
El relato lo asume en la cárcel, cumpliendo una condena de seis años por asaltar un banco. En todo ese tiempo nunca dejó de entrenar, con la idea de retomar su profesión de maratonista al recobrar su libertad.
Y efectivamente, en su primera participación gana la máxima maratón anual de Viena e inclusive establece un nuevo récord para esa competencia.
Rettenberger es un ser solitario, hermético, misántropo y con serias dificultades para insertarse en el mundo laboral. Además es un compulsivo que, en apariencia, no puede dejar de robar, porque en esos momentos experimenta la mayor sensación de estar vivo.
¿El ladrón está fatalmente condenado a reincidir? Parecería que al protagonista de esta historia no le interesa el dinero y tampoco teme terminar abatido por la policía. Pero a lo que no parece dispuesto es a volver a la cárcel.
Velocidad y resistencia son sus atributos, a los que suma su obsesión compulsiva por robar bancos y escapar de la eventual persecución policial.
La única persona con la que logra establecer algo que parece una comunicación afectiva es con Erika, una joven a la que había conocido antes de ingresar a la cárcel y a la que reencuentra, por azar, al obtener su libertad condicional y tratar de conseguir un trabajo.
El responsable de esta propuesta fílmica es Benjamin Heisenberg, un cineasta nacido en 1975 en Tubinga, Alemania, que estudió en la Academia de Bellas Artes de Munich y en la Escuela de Cine y Televisión de esa misma ciudad.
Heisenberger también es el fundador de la revista de cine "Revolver" , un medio gráfico que le sirvió para difundir en Alemania y Austria las teorías del Dogma `95, con las que se identifica. Sin escape es su segundo largometraje. El primero se tituló Dormido, y data del año 2005.