Re loca

Crítica de María Fernanda Mugica - La Nación

Re loca es una comedia dirigida por Martino Zaidelis, basada en la fantasía de lo que puede pasar cuando una mujer harta decide hacer de la honestidad brutal su forma de vida. Un vecino ruidoso, un jefe inútil, un marido que no se ocupa de nada, un hijastro vago y un exnovio que le coquetea a pesar de estar por casarse con otra, entre otros, son a la vez instigadores y víctimas del desenfreno de Pilar.

La adaptación argentina de la chilena Sin filtro, que tuvo remakes en España y México, cuenta con una protagonista ideal, que combina talento actoral con la presencia de una estrella de cine: Natalia Oreiro. La actriz aporta energía, carisma y la vulnerabilidad suficientes en su interpretación para que su personaje resuene con el espectador. La rodea un elenco sólido, en el que se destacan Fernán Mirás y Malena Sánchez, como una influencer del infierno.

Algunos recursos humorísticos, como el uso de la puteada para generar risas, se hacen un poco repetitivos. Por otro lado, genera confusión y algo de amargura cómo se presenta el tema de la salud mental de Pilar, al mezclarse con la trama lúdica de su pulsión por hacer y decir lo que se le canta. Es notable el atractivo vestuario del film, a cargo de Greta Ure, probablemente con colaboración de la propia Oreiro (que también es diseñadora). Vale subrayar la importancia de darle a este rubro el lugar que se merece en la estética de la película y la construcción de los personajes, lo cual no siempre sucede.