Ojalá vivas tiempos interesantes

Crítica de Brenda Caletti - CineramaPlus+

INSTINTO OBSESIVO

_ ¿Sabés qué? Tu verdadera voz desentona – lo apremia el dueño de la editorial.

Marcos, quien experimenta una combinación de ira, instinto creador, ego herido y rebeldía ante semejante comentario, decide que ya es hora de abandonar la literatura infanto-juvenil y la editorial, que los días de fama obtenidos por sus personajes de detectives ya no tienen más sentido. Porque lo que Marcos quiere no es sólo poder matar personajes, sino escribir una obra seria; una que demuestre talento, habilidad y, por sobre todas las cosas, su auténtica voz.

Sin embargo, el ímpetu y el hambre de gloria se estancan con el tiempo frente al síndrome de la hoja en blanco y a la falta de inspiración. Por lo tanto, durante los cuatro años siguientes, el único cultivo provechoso del protagonista serán las erithinas holandesas gracias a la implementación de un sofisticado método invernadero en su departamento.

Dicho sistema no sólo se convierte en el sustento económico de Marcos, sino que actúa como herramienta central constitutiva del relato de la ópera prima de Santiago Van Dam puesto que es a través de la venta de las flores que el protagonista se relaciona con los numerosos personajes secundarios, se conforma a sí mismo a partir de las vivencias que necesita para recuperar la inspiración y trabaja los límites de la ficción / no ficción de su trunca novela.

Tal vez los más influyentes sean la anciana del supermercado chino que le echa una maldición (más bien un insulto antiguo), el amigo que está en Canadá y lo insta para que viaje, el vecino hippie que se entera de su negocio prohibido o la hija del portero; todos ellos como detonantes de quiebres del protagonista y del vínculo autor / obra.

A medida que transcurren los minutos, Ojalá vivas tiempos interesantes se torna más negra, siniestra y ambigua ya que se dificulta separar la construcción de los futuros capítulos del libro de las obsesiones de un hombre cegado por la pasión. Y esta mixtura y oscuridad vuelven a la película interesante y llamativa.

Quizás la voz de Marcos desafina pero la tenacidad y convicción con la que lleva a cabo su idea la transforman en algo armónico.

Por Brenda Caletti
@117Brenn