Life: La vida de James Dean

Crítica de Jessica Blady - Malditos Nerds - Vorterix

EN EL ESPACIO NADIE TE ESCUCHARÁ GRITAR

Antes de que vuelva el xenomorfo, se pueden entretener con este marciano con mal genio.
El sueco Daniel Espinosa (“Crímenes Ocultos”) supo tomar buena nota de “Alien – El Octavo Pasajero” (Alien, 1979) para pergeñar su propio thriller de ciencia ficción y terror ambientado en el espacio. Sí, “Life: Vida Inteligente” (Life, 2017) tiene muchísimos puntos en común con el clásico de Ridley Scott, pero se las ingenia para mantenernos atrapados durante un poco más de una hora y media, aunque sepamos de memoria por dónde viene la mano.

Estamos en un futuro no identificado a bordo de la Estación Espacial Internacional (EEI). Un grupo de seis astronautas tiene una misión muy específica: rescatar y analizar unas muestras provenientes de Marte que podrían terminar de probar la existencia de vida extraterrestre en el planeta rojo. Los tripulantes, un conjunto variopinto conformado por científicos, doctores e ingenieros de diferentes nacionalidades y razas, logran asegurar la carga y comienzan a analizar su contenido.

Pronto descubren un organismo unicelular bastante complejo, al cual los niñitos de la Tierra bautizan con el simpático nombre de Calvin. Al pasar de los días lo someten a diferentes experimentos, hasta que un error del laboratorio pone al bichito en una especie de sueño profundo. Hugh Derry (Ariyon Bakare), el científico a cargo, decide estimularlo un poco y ahí es cuando comienzan los verdaderos problemas. Calvin es mucho más inteligente de lo que todos creen y logra escapar para asegurar su supervivencia.

Lo que sigue, ya se lo podrán imaginar. El marciano está totalmente enojado, no para de crecer y busca desesperadamente un sustento para la vida. Encerrados en la EEI, los astronautas deberán encontrar la forma de atraparlo, deshacerse de él y evitar que llegue a la atmósfera terrestre.

Los puntos más fuertes de “Life” son su constante tensión, un gran elenco que no desentona en ningún momento (Jake Gyllenhaal, Rebecca Ferguson, Ryan Reynolds, Hiroyuki Sanada, Olga Dihovichnaya) y esa mezcla de sci-fi y realismo muy al estilo de “Gravedad” (Gravity, 2013).

El resto cae en demasiados lugares comunes. Sabemos de entrada lo que va a pasar y el final (admitámoslo) no nos guarda muchas sorpresas. Espinosa juega con la idea del hombre que arriesga todo en nombre de la ciencia, ese que juega a ser dios sin medir las consecuencias, pero al final debe aceptar la responsabilidad de cada uno de sus actos.

“Life” no alcanza ese extremo de la atmósfera oscura y terrorífica de “Alien”, es más bien un peligroso juego del gato y el ratón dentro del espacio reducido de la EEI. No llegamos a empatizar 100% con los protagonistas porque apenas los conocemos, igual sufrimos por sus circunstancias y el destino (incierto) que les espera.

Espinosa logra llevarnos al espacio y convencernos. Sus efectos especiales son sutiles y realistas, todo bien hasta que aparece Calvin y un poco se nos desinfla el globo. Igual, la historia sobrevive a los clichés y se transforma en un gran entretenimiento. No va a quedar en los anales, pero es lindo ver como los seres humanos se queman cuando juegan con fuego.