Ladrona de libros

Crítica de Lilian Lapelle - Cine & Medios

Libros y tragedia

Liesel (Sophie Nélisse) es una nena que atraviesa Alemania, en el año 1941, para llegar a casa de sus padres adoptivos, Hans (Geoffrey Rush) y Rosa (Emily Watson). Hans es dulce y trata de acercarse a la nena quien al principio está aterrada con tantos cambios en su vida, y Rosa es una mujer estricta, pero que a través de la historia demostrará tener un gran corazón.
Al principio es difícil para Liesel adaptarse a su nuevo hogar, a su nueva vida. Especialmente al colegio, donde está en desventaja educativa con el resto de sus compañeros, y es por eso que en su afán de aprender se aferra a las letras. La lectura se convierte en una herramienta, en un vínculo con su nuevo padre y en un refugio, tanto para ella como para Max (Max Schnetzer), un chico judío a quien la familia esconde en el sótano de la casa.
Si bien el tema central de la película son los libros, las ideas que sobreviven en papel, y lo que significa la lectura en nuestras vidas, la historia no saca buen provecho de esto, ya que hace mas hincapié en mostrar con detalles el contexto trágico en el que crece la protagonista, que en la resistencia que se puede hacer desde la escritura, las ideas que pueden contener las palabras o como pueden salvarnos las reflexiones de otros en momentos terribles.
Con una excelente reproducción de época, cuidada hasta en el más mínimo detalle, sumado a una hermosa fotografía, la película utiliza estas herramientas estéticas para mostrar más dolor en las escenas y así lograr arrancar más lagrimas.
Cabe destacar que las actuaciones son todas muy buenas, especialmente la de Geoffrey Rush, quien compone a un hombre sin mucha educación ni recursos, pero con una gran sensibilidad y compasión.
Es imposible que una película que trata temas como el holocausto o la segunda guerra mundial no sea triste, pero el director tomó el camino fácil de crear un melodrama políticamente correcto y asegurarse audiencia, en vez utilizar un poco más la reflexión, o la ironía, como si sucede en el libro de Markus Zusak, en el que está basada esta película.