La masacre de Texas

Crítica de Emilio Guazzaroni - Cinergia

El loco de la motosierra

Leatherface es el nombre original de la película dirigida por la dupla entre Alexandre Bustillo y Julien Maury. En hispanoamérica se la decidió llamar La masacre de Texas: el origen de Leatherface, siendo más evidente lo que deciden narrar a lo largo de los 90 minutos.

Un oscuro y trastornado hombre, llamado Jedidah Sawyer, utiliza habitualmente una máscara de piel humana y una motosierra para descuartizar a sus víctimas. Leatherface es un personaje conocido por ser el terrorífico asesino en la saga La masacre de Texas.

El pequeño Jed forma parte de una extraña familia (los Sawyer), que matan personas para alimentar a sus cerdos. Después de uno de los acontecimientos, Jed es enviado a un hospital psiquiátrico. Luego de escaparse es cuando realmente vemos al verdadero Leatherface que tiene adentro.

La película es entretenida, ya que constantemente intentan escapar de los peligros que impone tanto el hospital como la policía. Los personajes logran transformarse de tal manera que el cordero desprotegido es un lobo feroz. Un guion interesante en base a desarrollo de personajes pero limitado en diálogo narrativo.

El género del film es terror gore, el cual demuestra en cada escena de violencia la fragilidad de los cuerpos (los despedazan, hay sangre y tripas por doquier). Este tipo de películas no dejan nada a la imaginación. De esta forma hace impresionar más al espectador por el nivel de agresividad que por el hilo narrativo o momentos de suspenso.

Las actuaciones no sobresalen en ningún momento, son hasta un tanto exageradas. Siempre es interesante poder expandir este tipo de personajes icónicos y lo lograron de forma sutil. Dato no menor es que se puede ver sin haber visto la saga, ya que es una precuela de The Texas Chain Saw Massacre (1974).