La casa de al lado

Crítica de Nicolás Manca - El Espectador Avezado

Yo pensé que esta película iba a ser la típica película de terror. Una madre soltera que trabaja mucho de noche, una hija única y una casa alejada de las demás, excepto de la casa de al lado, donde hace varios años hubo un asesinato y la culpable nunca fue encontrada.
Estaba equivocado, porque la película no es de terror, sino que es un thriller. Es, por supuesto, un típico thriller estadounidense, donde todo está servido para que el espectador no tenga que utilizar demasiado sus neuronas, donde todo es predecible, donde todos los personajes son unidimensionales, donde…
Elissa es una estudiante del secundario. Una hija ejemplar básicamente, que además de comportarse bien es una buena música. Jennifer Lawrence realiza este rol, en la que es su última película, luego del gran éxito de “Los juegos del hambre”, película donde ella es también la protagonista.
Ella vive con su madre (Elizabeth Shue, Sera en “Leaving Las Vegas”) que trabaja en un hospital y tiene que realizar el turno de la noche demasiado seguido. Por esas cosas del destino, ellas se mudaron a una hermosa casa en medio del bosque, en lo que parece ser el estado de Illinois en los EE.UU., que queda al lado de una casa donde unos años antes una niña mató a sus padres con un cuchillo. En esta casa vive el hijo del matrimonio, un joven llamado Ryan, interpretado por Max Thieriot, que si bien se lo ve tímido, uno nunca diría que fue testigo de lo que le sucedió varios años antes a su familia.
Cuando nos enteramos que la hermana de Ryan, Carrie Anne, que para todo el mundo estaba muerta, esta de hecho más viva que nunca, y vive en el sótano de su casa, donde su hermano la cuida, es donde los problemas comienzan.
El film es un bastante simple, y accesible, para todo público, donde muchas veces lo más interesante es poder apreciar la belleza de las actrices en mi caso, o actores para quienes tengan ese tipo de interes. En este caso Jennifer Lawrence no luce tan bella como en otras oportunidades, y se extraña eso. En cuanto a la dirección de Mark Tonderai (a quien pueden recordar, quizás por "Hush"), es convencional y sin mayores matices. Trata de mantener todas las variables bajo control y no deja que el film arriesgue mucho en su propuesta.
Una película que puede llegar a ser entretenida, llevadera si estás con ganas de ver algo sencillo y directo, no más que eso.