Hardcore: misión extrema

Crítica de Fernando Juan Lima - Otros Cines

El secreto de sus ojos

Un valioso film de acción, un ensayo sobre el punto de vista financiado vía crowdfunding y rodado casi íntegramente con cámaras Go-Pro.

Una auténtica sorpresa, de esas que el “boca a boca” puede hacer agotar las entradas y las salas se pueblan de un público festivo dispuesto a disfrutar de una montaña rusa de acción atronadora.

Confieso que la primera vez que intenté verla en el último Festival de Toronto me fui a los 15 minutos de la proyección, algo mareado (y con mucho hambre, por cierto). Es que Hardcore: Misión extrema propone una experiencia casi física, la de la subjetiva de un hombre-robot creado especialmente para la guerra, desde su punto de vista, como si se tratara de un juego de la PlayStation.

El tono es el de irresponsable festejo de la violencia más cruda, los efectos son prodigiosos y (cuestión no tan habitual) nunca se deja de lado la consigna: en todo momento sólo vemos lo que observa el protagonista, en la pantalla asistimos a lo que ven sus ojos. Gran divertimento, especial para una trasnoche.