El último exorcismo

Crítica de Primo - La Cinerata

Bueno, debo admitir que este antitrailer es un reto a mi caradurés, dado que la única película de exorcismos que había visto hasta ahora era El Exorcista. Si alguno siente que no soy "quién para hablar"... seguro es envidia porque yo ya la vi en el cine, babosos (gracias por la invitación a la avant).

Aunque reconozco que el póster es uno de esos factores irrelevantes a la hora de decidir ver una película, debo mencionar que éste está muy bueno. Te pone a clima, algo que no le falta a esta película que te mezcla incógnitas con escenas que te hacen aferrarte a la butaca con extensos "no pasa, pero va a pasar" de la nena parada inmóvil viendo al piso.

¿De qué la va? Es la historia de un cura muy carismático que realiza exorcismos por efecto placebo y quiere documentar uno de ellos para evitar que se sigan practicando. Obviamente, todo se complica porque si no la película duraría 30 minutos, o 90 siendo un bodrio.

La película está realizada en formato falso-documental, lo cual no representa ninguna novedad dentro de los géneros de "miedo". Es una realidad, ya tenemos Blairwitch, REC, Actividad Paranormal, Diary of the Dead (si quieren la lista completa pongan en google "te dije que apagues esa cámara" y salen todas), pero otra realidad es que incrementa el suspenso, porque te involucra mucho más. En este caso particular, algo que tengo que destacar es el carisma del protagonista, que hace que esos largos minutos en los que todavía no pasa nada sean entretenidos (o hasta gracioso por momentos), los que vieron actividad paranormal lo van a saber apreciar.

No soy partidario de hablar de directores porque, seamos sinceros, la frase "del director de..." no te garantiza mucho, un poco sí, pero no tanto; cada director es especial y no necesariamente te tiene que gustar todo lo que haga. En este caso voy a hacer una excepción, sólo porque se trata de Eli Roth. Si no lo reconocés en la foto, te recomiendo que lo imagines con una musculosa blanca, unos pantalones militares, un bate de béisbol y un nazi arrodillado en frente... No tengo nada más que decir al respecto.

No apta para los que busquen una película de terror lineal, porque produce varios "momento, no era que...".