Dredd

Crítica de Luciana Boglioli - La Capital

Exceso de sangre

La radiación amenaza Norteamérica. Hay 17 mil crímenes por día en la ciudad Mega City One, una metrópoli con 400 millones de personas y donde los jueces son los únicos encargados de hacer justicia. Dredd (Karl Urban) es uno de los legendarios jueces, usa una máscara que jamás deja ver su rostro y se expresa con monosílabos. En una misión de rutina, Dredd junto a la novata psíquica Cassandra Anderson (Olivia Thrilby) entran en un magno edificio para capturar a la jefa de una organización criminal que trafica estupefacientes y autora de numerosos crímenes en los últimos días. Se trata de la criminal más temida y ex prostituta “Ma-ma” (Lena Headley) que tratará durante los 98 minutos que dura el filme, de matar a los dos jueces que quieren atraparla. En pos de la supervivencia, los jueces imparten justicia, matando al que se interponga en su camino. Así, mueren inocentes, niños, familias enteras. Y todos sucede dentro de un edificio hermético de más de 200 pisos donde no puede entrar ni salir nadie. Una película sólo apta para los amantes de la sangre, los tiros y la muerte en extremo.