Copia certificada

Crítica de Fernando Alvarez - Todo lo ve

La pareja "perfecta"

El creador de El sabor de la cereza, el iraní Abbas Kiarostami, se caracteriza por un cine despojado de artilugios y que lleva su sello personal. Esta realización paseó por prestigiosos festivales, resulta su primera experiencia europea, e invita al espectador a reflexionar sobre el valor de lo original y las copias en el arte.

Hablada en italiano, francés e inglés, Copia certificada es la historia del encuentro entre un escritor (William Shimell) que llega a un pueblo italiano del sur de la Toscana para brindar una conferencia sobre su último libro, y una galerista de arte de París (Juliette Binoche). El concepto de lo verdadero y falso en las obras de arte se traslada con varios cuestionamientos al tema de la pareja.

"La Toscana es el lugar donde la gente se promete amor eterno" asegura ella, que está separada hace 15 años y se hace cargo de su hijo varón, mientras recorre con el escritor distintos lugares y hasta se los confunde con un matrimonio.

El film tiene minutos de más pero enmarca con precisión el periplo de estos dos seres solitarios y sugiere varias interpretaciones para el espectador. La misma historia no deja claro si ella es dueña de una imaginación frondosa (cuando habla a cámara dirgiéndose a su ex marido) o simplemente cree revivir con el recién llegado los años de su relación anterior.

Entre una anciana conocedora de los secretos del matrimonio y jóvenes parejas que se casan, el relato sigue su marcha con estos dos personajes que dialogan, callan y sufren, quizás una suerte de paréntesis emocional que atraviesan los protagonistas entre los extremos de la juventud y la ancianidad que expone el relato.

Juliette Binoche siempre está impecable en los roles que asume, mientras que William Shimell impone una máscara más rígida para un hombre que vive presionado por los llamados y un tren que lo espera para un regreso incierto.